Leila Gianni: "Hay que salir del 'si tenés flequillo sos kirchnerista'"
La exsubsecretaria Legal del Ministerio de Capital Humano habló sobre su salida de la cartera de Sandra Pettovello para "despertar Leones", admitió su origen peronista y explicó "cómo la vio".
Leila Gianni y su "Brigada Anticorrupción" fue la espada legal de la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, en su cruzada contra las organizaciones sociales, a quienes tilda de "militantes del hambre". Sin embargo, este mes dejó su cargo como subsecretaria Legal de la cartera con otro objetivo en mente: "Despertar Leones en La Matanza", enfatizó en una entrevista con MDZ.
Además de sus enfrentamientos públicos con el dirigente social Juan Grabois, el caso de Gianni llamó la atención luego de que se conociera su amplia trayectoria por la administración pública, donde ocupó cargos a lo largo de los gobiernos de Cristina Fernández de Kirchner, Mauricio Macri y Alberto Fernández. Durante el mandato de este último, militó en sus redes por la candidatura del exministro de Economía Sergio Massa, aunque luego borró sus redes y solo quedaron registros desde abril de 2024.
Sin embargo, la exfuncionaria explicó que "nunca fue de La Cámpora ni es kirchnerista" y remarcó que "no va a ser ni la primera ni la última persona en el mundo que la vio". También reveló que su hijo fue quien la llevó hacia el camino de las Fuerzas del Cielo y se burló de las críticas que recibe en las redes: "Hay que salir de ese casillero de que si tenés flequillo sos kirchnerista".
- ¿Por qué la decisión de abandonar tu cargo en el Ministerio de Capital Humano?
- Fue una salida consensuada junto a la ministra Pettovello. Consideré necesario salir del escritorio para ir al territorio y dar la batalla cultural que necesita el presidente Javier Milei en cada barrio y cada esquina. Particularmente en La Matanza, un municipio gobernado hace años por políticos de la casta empobrecedora y militantes del hambre que no hacen otra cosa que someter a los sectores más vulnerables a quienes ellos dicen proteger. Muchos me preguntan por qué no te quedaste en tu despacho en Avenida Alvear y Rodríguez Peña, pleno barrio de Recoleta. Yo no necesito un palacio donde gestionar, sino salir a escuchar a la gente, brindar soluciones y continuar despertando leones, tal como lo pide el presidente.
- ¿Cómo quedó tu relación con la ministra Pettovello?
- Se han inventado un montón de operaciones. Muchísimos periodistas ensobrados que todavía tienen los ojos tapados por los billetes que le han puesto gobiernos anteriores, pero tengo una excelente relación con ella.
- ¿Cómo evalúas tu paso por el Ministerio?
- Fue una gestión muy exitosa. Ahí conformé y lideré la famosa Brigada Anticorrupción, como le gusta decir al presidente. Nos dedicamos a auditar y a denunciar un plan sistemático de corrupción y opresión a los más vulnerables que estaba creado desde el exMinisterio de Desarrollo Social, en connivencia con ciertas organizaciones sociales en donde no hicieron nada más que robar el dinero de todos los argentinos, además de oprimir y robar a los sectores más pobres a quienes ellos dicen proteger permanentemente. Hemos hecho más de 30 denuncias penales y permanentemente aportamos pruebas y documental a todos los fiscales y jueces para que las causas tengan el impulso necesario y no queden dormidas en los cajones de Comodoro Py.
- Capital Humano también estuvo en el centro de la escena mediática por los alimentos retenidos en los galpones del Ministerio
- Esa es la denuncia que hizo el monaguillo del año, Juan Grabois. Yo siempre le digo que se confundió de fuero porque claramente se le rompió su negocio y debería haber ido a reclamar por su negocio al foro comercial. Nosotros desde la subsecretaría legal hemos apelado la decisión, porque el Poder Judicial no puede meterse en el diseño y en la ejecución de una política pública. Independientemente de ello, los alimentos que estaban en los galpones, que habían sido adquiridos por la gestión anterior, fueron entregados en su totalidad a las diferentes provincias y distribuidos en escuelas vulnerables. Grabois está nervioso porque para estos militantes del hambre esos alimentos son un elemento de poder. Con ellos obligaban a marchar a los más vulnerables, entonces si les sacás a la organizaciones el bolsón de alimentos ya no pueden ejercer el mismo control sobre sus subordinados, que son los vulnerables a quienes ellos dicen proteger.
- ¿No había comedores que funcionaran correctamente?
- Las políticas en materia de asistencia alimentaria de las gestiones anteriores estaban basadas en un asistencialismo que creaba un clientelismo político y multiplicaba la pobreza. El Ministerio de Desarrollo Social compraba kilos y kilos de comida, muchas veces a través de licitaciones espurias y direccionadas que nosotros hemos denunciado, y después arreglaban con las organizaciones sociales amigas con la excusa de ser repartidos a comedores que ellos decían que representaban. Cuando nosotros asumimos, pudimos identificar que más del 50% de estos comedores no existían. Muchas veces ellos obligaban a las personas que oprimían y violentaban a vender esos alimentos en las ferias barriales y a pedirles la ganancia de lo vendido, o los hacían repartir volantes en las esquinas de los barrios. Hoy se cambió el paradigma a una asistencia directa. A los comedores que si existían se los está asistiendo a través del programa Alimentar Comunidad, donde desde la Secretaría de Niñez se le entrega una tarjeta y en función de la cantidad de gente que el comedor recibe, se le deposita una determinada suma de dinero para que pueda cubrir el almuerzo y la merienda. Esto además de la asistencia directa al beneficiario. Al mes de septiembre entre la Tarjeta Alimentar Personal y la AUH cubren un 98% de la canasta básica.
- Dijiste que tenés ganas de recorrer La Matanza y trabajar el territorio ¿Podemos pensar en una candidatura en una lista para el año que viene?
- No estoy pensando en ninguna lista, para eso falta mucho tiempo y las van a definir Karina, Sebastián Pareja, Martín Menem y todos los integrantes de La Libertad Avanza. Yo lo que estoy empezando a hacer es un trabajo territorial en La Matanza para despertar a esos leones que están dormidos y que están siendo subordinados permanentemente por “Tintura” Espinoza. La población está muy polarizada y tenés diferentes clases sociales, pero todos tienen ganas de sentir aires de libertad. La Matanza estuvo durante años dominada por mafias y es uno de los municipios en la provincia de Buenos Aires donde existe el mayor nivel de inseguridad. Es un claro ejemplo del no del no progreso. No le interesa al intendente Espinoza que haya empresarios del sector privado que apuesten en tierras de ese municipio y generen puestos de trabajo. Un claro ejemplo de esto es la clausura arbitraria, ilegítima del Centro de distribución y almacenamiento de MercadoLibre. Por eso este martes presentamos ante la Cámara Correccional Criminal y Federal una denuncia en su contra por abuso de autoridad en cumplimiento de los deberes de funcionario público y en estos días estaremos yendo a ratificar.
- ¿Quiénes son los referentes que te están acompañando desde la libertad Avanza en esa tarea?
A Karina no la conozco personalmente. Es una mujer a la que admiro mucho. Está haciendo un trabajo épico en la provincia de Buenos Aires. Con Sebastián Pareja sí tengo un excelente vínculo, nos entendemos mucho. Después estoy en diálogo y comenzando a trabajar con la concejala Lorena Ramos por La libertad Avanza dentro de La Matanza y Luis Ontiveros.
- ¿Hablaste con el presidente Javier Milei?
- Me apoyó, me dijo que le parecía bien que vaya y que me mueva. Es una excelente persona, es un ser muy transparente. Es así como se lo ve en los medios. Es realmente un hombre que lo está dando todo para poder realizar en este país el cambio que necesita. De su mano, la Argentina tiene la oportunidad de volver a nacer.
- ¿Cómo empieza tu camino en la política?
-Yo soy funcionaria de carrera dentro del Estado Nacional. Arranqué en el año 2012 a trabajar en lo que era en ese momento la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sostenible. Después tuve mi primer cargo en el INTI como directora de compras; me convocaron para estar a cargo de la Coordinación de Asuntos Jurídicos del Centro Internacional para los Derechos Humanos en el Ministerio de Justicia; estuve como asesora en el Ministerio de Obras Públicas; tuve un cargo como coordinadora de contrataciones de Obras e Infraestructura en la Anses; y después directora de proyectos ambientales dentro de lo que fue el Ministerio de Ambiente. No milité en La Cámpora y no soy kirchnerista. Se han inventado tantas cosas sobre mi persona que es digno de una serie de Netflix.
- En los medios se difundieron posteos tuyos llamando a votar a Sergio Massa.
-No voy a ser ni la primera ni la última persona en el mundo que la vio y que pudo sentir una afinidad política por otro espacio. Sí, tengo un origen peronista, pero estoy orgullosa de haber entendido que el cambio es de la mano de Javier Milei, de haber visto cómo en nombre de los más vulnerables, el peronismo y el kirchnerismo hizo mierda todo. Por eso siento una tarea especial en salir a la calle y hablar con las personas para que puedan despertar y ver la realidad.
- ¿Cómo fue ese proceso de verla de noviembre de 2023, cuando llamabas a votar a Massa, a hoy?
- El que me la hizo ver primero fue mi hijo, que hoy tiene 20 años. Él desde que tenía 14 era fanático. Le decía ‘el Peluca’ por Milei. Me hacía ver los videos, me hizo llevarlo a la presentación del libro de (Agustín) Laje y (Nicolás) Márquez, El libro negro de la nueva izquierda, en donde estaba Javier Milei. Fue la marcha de las dos vidas. Como le habrá pasado a muchas madres y padres, fueron los pibes de menos de 20 los que nos hicieron ver que el camino era por acá, que había otra manera de hacer política. Nosotros veníamos de la vieja política tradicional en donde te iban infectando la cabeza con determinados conceptos. Después desde la Subsecretaría Legal del Ministerio Capital Humano pude ver en primera mano toda la prueba de cómo vaciaron los fondos del Estado Nacional para fondear sus organizaciones sociales y cómo atropellaron los derechos de los más vulnerables.
- ¿Eso no lo viste durante los 12 años anteriores que ocupaste cargos en el Estado?
- Yo ocupé diferentes cargos que eran más bien técnicos, no estabas metido. La gente antes no se animaba a denunciar ni había una línea 134 como se estableció a través del Ministerio de Seguridad este año. La gente callaba por miedo y no había pruebas. La gente ahora pudo verlas y se animó a denunciar. Sí cuando fui funcionaria en el Ministerio de Ambiente en los últimos dos años discutí con el ministro (Juan) Cabandié, porque nadie le quería proveer elementos de protección personal a los recuperadores informales que iban a trabajar en una planta de separación de residuos en Formosa. Ahí pude ver cómo la gente siempre estuvo atrás para el kirchnerismo.
- ¿Te generó algún problema con la militancia o con tus compañeros de gestión el haber pertenecido a una fuerza política diferente en el pasado?
- Yo he laburado como pocos junto al equipo dentro de la Subsecretaría Legal y nos la jugamos investigando y firmando más de 30 denuncias. Consecuencia de ello una vez ahí me amenazaron haciéndose pasar por uno de mis hijos. Tuve que tener custodia de la Policía Federal. Muchos me dicen ¿por qué te arriesgas? ¿No tenés miedo? Vale la pena hacer esto.Hay que acompañar a la gente que denuncia.
- ¿Cómo convivís con las redes sociales y los ataques?
- No me mueven ni un pelo. A veces me mato de risa con las pavadas que escriben y el nivel de ocurrencia que tienen, pero no me afecta. Me pasaron en la vida muchísimas cosas más fuertes a nivel personal.
- Una chicana de las redes que vos retomaste en una discusión con Juan Grabois fue sobre un supuesto tatuaje tuyo de un pingüino.
- Claro, le dije que al pingüino se lo comió el león.
- ¿Es verdad lo del tatuaje?
- No hay ningún tatuaje.
- ¿Se viene uno de un león?
- Acá está, (se señala el brazo) después lo mostramos. Me han dicho que tenía un tatuaje de Néstor y de Cristina. Otra cosa fue el flequillo, que lo tengo desde los 18 años porque me gustan los Ramones. Hay que salir de ese casillero de que si tenés flequillo sos kirchnerista. Cada uno tiene la libertad de peinarse como quiere y eso no va a definir tu ideología ni tu forma de pensar.
La entrevista completa a Leila Gianni