Conocé el plan de viviendas que propone cada uno de los precandidatos a gobernador

A días de las elecciones, MDZ te acerca las propuestas de los diferentes precandidatos que aspiran a conducir los hilos de la provincia desde diciembre. Uno de los ejes de la campaña fue el déficit habitacional que existe en Mendoza y que incluso supera la media nacional. En Mendoza, el 40% de los ciudadanos no tiene casa, mientras que en el promedio país ese número ronda el 35%.

En ese contexto, los diferentes precandidatos han dado a conocer las medidas que tomarían si llegan a suceder a Rodolfo Suarez en el Ejecutivo. 

Víctor Da Vila (Frente de Izquierda): 

Puesta en marcha de un plan de obra pública que se centre en urbanizar los barrios más postergados y la construcción de viviendas. Este debe ser ejecutado directamente por la provincia y los municipios, terminando con el negocio de los empresarios amigos y las licitaciones privadas que encarecen las obras en más del 50%. Crear el banco de tierras. También establecer un convenio con los municipios para que los sectores operativos de estos sean quienes ejecuten las obras menores.

Modificar el impuesto inmobiliario, eximiendo a la vivienda única, progresivo a partir de la segunda vivienda y con alícuotas especiales para la vivienda ociosa.De esta forma se exime a las familias que utilizan la vivienda para residir, se establece un tributo justo y se castiga la especulación.

Lautaro Jiménez (Frente de Izquierda):

Proponemos un plan de obras públicas y acceso al crédito hipotecario para la construcción de viviendas para las familias trabajadoras. De esta forma podría darse respuesta al déficit habitacional a la vez que permitiría bajar el costo de los alquileres que hoy son impagables. Además un plan de urbanización que llegue a todos los barrios, respetando el ambiente y garantizando los servicios básicos a todas las familias. 

Impulsaremos una ley de alquileres que beneficie la vivienda social, no sólo el turismo como sucede actualmente, y establezca que el costo de alquiler de una vivienda familiar no puede superar el 30% de los gastos familiares y la evolución de la canasta básica y el índice salarial.

Guillermo Carmona (Frente Elegí):

Lanzaremos un ambicioso plan que posibilite el acceso a lotes urbanizados y con servicios, en una tarea conjunta entre el gobierno provincial y los municipios.Implementaremos un programa de créditos hipotecarios subsidiados para la adquisición de primera vivienda y para la refacción de vivienda propia. Así como establecer créditos con tasas diferenciadas para jóvenes inquilinos y mujeres que son jefas de hogar.

Generación de incentivos fiscales para quienes construyan sus viviendas con sistemas ecológicos y sustentables. Asimismo, pondremos en marcha el sistema de otorgamientos de créditos para trabajadores y trabajadoras del estado y personas con trabajo registrado en el sector privado mediante la tramitación completamente online de los créditos, concretando en Mendoza la experiencia que Guillermo Carmona llevó adelante desde el Instituto de Ayuda Financiera del Ministerio de Defensa, única experiencia en el país de créditos personales e hipotecarios tramitados totalmente de manera remota.

Omar Parisi (Frente Elegí):

En materia de hábitat, Mendoza necesita 75.000 viviendas nuevas, reparar 52.000, ampliar 20.000 y regularizar la situación dominial de 65.000. Estamos hablando de más de 200.00 soluciones que debemos llevar a las familias mendocinas.

La herramienta para esto es realizar una “revolución de la vivienda” lo que también generaría un shock de impulso para la economía y el trabajo.

Esta revolución de la vivienda será el eje sobre el cual deberán sostenerse las prioridades en servicios públicos, deporte, salud, educación, infraestructura, transporte y uso del suelo.

Alfredo Cornejo (Cambia Mendoza): 

No envió sus propuestas a MDZ.

Luis Petri (Cambia Mendoza):

Ejecutar casa para distintos estratos sociales, aplicando distintos regímenes de recupero (casas en el campo, semi-urbanas y urbanas). Buscar financiamiento en el extranjero, además del financiamiento que ya posee como es el FONAVI y fondos provinciales-nacionales. Poner énfasis en el recupero de capital. Si la gente no devuelve el crédito, la rueda no puede seguir girando.Una de las claves será que un porcentaje de las viviendas asignadas será para empleados públicos que estén alquilando. 

El IPV debe ocupar la función de policía de los municipios. El personal de Acción Social del IPV, podría reducirse a 2 personas, reasignando el resto a los Municipios.  Los municipios podrían actuar como entidad intermedia, detectando y adquiriendo lotes ociosos (lotes urbanos de hasta 4.000 m2) a través de registro de adjudicatarios creado a tal fin, pudiéndose llegar a la elaboración de proyectos y pre-adjudicaciones. De esto hay muy buenas experiencias como los que hay en Ciudad.  
Así se podrían ejecutar en 4 años unas 10.000 viviendas (no la trampa de las soluciones habitacionales), consiguiendo aportes por parte de Nación y/o financiamiento internacional. 

Omar De Marchi (La Unión Mendocina):

Las viviendas no deben ser estandarizadas sino ajustadas a las necesidades. Para lograr estos objetivos tenemos definido darle otro rol al IPV como órgano rector de la política de vivienda y para ello debe ser modernizado a partir de su rediseño institucional que le otorgue mayor protagonismo como facilitador de construcción de casas y no tanto como constructor. Además debemos medir la productividad del organismo.

Vamos a priorizar definitivamente distintos programas que contribuyan a achicar la brecha del déficit habitacional que cada vez es más grande en Mendoza.

Nicolás Guillén (Elegí):

Daremos acceso a 5000 lotes de 350 metros cuadrados en forma inmediata. El Estado es el único que puede destrabar el acceso masivo a la tierra evitando pisar los cordones verdes con barrios, y ser ordenador de una actividad que tiene a los privados como motor económico, organizados en uniones vecinales e industriales para la vivienda. Ya con el lote adjudicado, cada familia puede optar en construir en forma individual o asociarse en cooperativas de construcción ayudadas desde el Estado en la dirección técnica y maquinarias necesarias para la construcción. La cuota del crédito para el lote será acorde a los ingresos de la familia, eliminando toda traba burocrática para asegurar el acceso a la casa propia. Los fondos presupuestarios están calculados en torno a un 2% del presupuesto.

Alfredo Guevara (Elegí):

Más 150.000 familias mendocinas padecen deficiencias habitacionales. En Mendoza el IPV ya no funciona, el concepto viviendista ha fracasado. Es una estructura burocrática que sólo satisface las necesidades de las empresas constructoras. Por eso vamos a crear un Ministerio de Hábitat y Vivienda con los recursos del I.P.V. reformulando su funcionamiento para que deje de estar al servicio de las grandes empresas constructoras contratistas que generan sobre precio y corrupción. Vamos a declarar la emergencia habitacional.

La producción de lotes con servicios, la creación de un banco de tierras, y también de viviendas construidas por cooperativas. Supone también las obras de consolidación, de infraestructura, urbanización y mitigación ambiental para los 317 barrios populares de la Provincia.

Se habilitarán líneas de crédito hipotecario para construcción de viviendas, con una tasa adecuada y una cuota similar a la de un alquiler. Esa política debe incluir la regularización del dominio. Proponemos el trabajo con cooperativas, retomando la experiencia positiva que fuera interrumpida con la persecución a la Organización Tupac Amaru.

Mario Vadillo (Partido Verde):

Proponemos un Programa de Alquiler de Viviendas con Opción a Compra, pensado para los inquilinos, parejas recién formadas, jubilados y quien quiera tener su casa. Un plan por el cual los beneficiarios accederán a una vivienda modular que podrán alquilar, lo que significará un pago a cuenta de la vivienda hasta tener la opción de comprarla y luego ampliarla con nuevos módulos.

Viviendas modulares: este sistema permitirá una entrega y cancelación rápida por ser de fácil construcción y de bajos costos económicos.

Ampliación: por ser casas modulares, la ampliación de ambientes, agregando más habitaciones u otros espacios de convivencia y ocio es perfectamente posible y accesible.

Loteos fiscales: el programa incluirá la urbanización de loteos fiscales para levantar las nuevas viviendas.