El clima pone a prueba a Jorge Macri
El jefe de Gobierno porteño afronta una semana tensionada tanto por el temporal como por la manifestación de piqueteros. El detalle del conflicto.
El clima parece poner a prueba a Jorge Macri, el social y el otro, en momentos de estreno de cargo, también en el Gobierno nacional. Una de las apuestas del jefe de Gobierno es destacarse en lo que se refiere a Seguridad, al punto, inclusive, que separó Seguridad del área de Justicia para mantenerla en un ministerio propio.
Macri le dio la conducción de esa cartera a Waldo Wolff y la jefatura de la Policía a Diego Kravetz, un civil, quien recala en la Ciudad de Buenos Aires tras desempeñarse como Secretario de Seguridad en el municipio de Lanús. Con ellos, el jefe porteño aseguró que se propone recuperar el orden en las calles.
Así, Jorge Macri buscará la centralidad a pesar de que esas posiciones suelen ser de riesgo. "Jorge es así, le gusta tomar riesgo", asegura un alto funcionario del entorno de jefe de Gobierno para coincidir en que, cuanto más expuesto es el rol principal en una determinada acción, mayor es el riesgo de, si algo falla, tener que asumir los costos que se presenten.
Como sea, esta semana, Macri expondrá a sus fuerzas de Seguridad al control de un operativo al que ya le puso reglas la ministra de la Nación, Patricia Bullrich. En principio será en el monitoreo de la marcha convocada por el Polo Obrero y otras organizaciones de la izquierda en el aniversario del 19 y 20 de diciembre. Desafían con el primer piquete "contra el ajuste" y a la vez el gobierno nacional desafía con las sanciones en momento donde el clima social se condimenta con las fiestas de fin de año que atraviesan la economía doméstica, entre otras cuestiones.
La semana pasada, Jorge Macri presentó a la cúpula de la Policía de la Ciudad, nombrando a Kravetz, secundado, como subjefe, al Comisario General Oscar Passi.
De allí comenzó a dar muestras de cómo se manejará con el espacio público, con la determinación de evitar los piquetes y que las manifestaciones se hagan "en la vereda" o en plazas. Un desafío de Bullrich que condiciona al jefe de Gobierno a pesar de sintonizar con la ministra: "Por suerte está Patricia" ahí, ya manifestó.
En la misma semana en que Bullrich anunció un protocolo antipiquetes que castigará los cortes de calle y a quienes lleven niños a las manifestaciones, entre otras condiciones, Jorge Macri desalojó la Plaza Lavalle en el centro porteño como una muestra de cumplimiento de lo que se propone.
El viernes a la mañana, el Gobierno de la Ciudad comunicó que desalojó "pacíficamente" la “ranchada” ubicada en la Plaza Lavalle, donde decenas de personas ocupaban ilegalmente el espacio público desde hacía 4 meses.
"En la ciudad asumimos un compromiso con los vecinos: ordenar el espacio público para que puedan volver a disfrutarlo. No da lo mismo avasallar los derechos de otros que apostar a una convivencia respetuosa. Vamos a seguir por este camino del orden", dijo entonces Jorge Macri.
Los ocupantes eran miembros del Tercer Malón de la Paz de Jujuy, quienes realizaban una “vigilia” frente a Tribunales para reclamar contra la reforma de la Constitución de la provincia.
En otro sentido, el temporal que se desató el domingo de madrugada también mostró a un jefe de Gobierno que busca ponerse al frente, sin doble de riesgo.
El control de la manifestación por el 20 de diciembre será entonces clave esta semana.