Balotaje: una elección con falsa calma, denuncias y rumores de todo tipo
Sergio Massa y Javier Milei se fueron al búnker de sus espacios a esperar los resultados. No hubo grandes disturbios y la participación ronda el 76%. Se esperan resultados antes de las 21.
Robo y rotura de boletas, amedrentamiento a fiscales, faltante de reposición, todo pasó este domingo en el balotaje, por segunda vez desde 1983, entre Javier Milei y Sergio Massa. Hasta Dark Vather fue a votar en Córdoba custodiado por soldados de la galaxia; en San Juan el kirchnerismo denunció boletas rotas y en el Conurbano los fiscales de Javier Milei lo mismo en espejo. Es un proceso electoral que termina con absoluta tranquilidad, más allá de hechos puntuales y espaciados a lo largo del país. No hubo grandes desmadres, los candidatos votaron temprano y en paz, lo hicieron también Mauricio Macri y Cristina Fernández de Kirchner, y la sociedad espera con ansias la confirmación de su propio rumor, por que los dos corren como pólvora.
MDZ conversó con una veintena de dirigentes, consultores, operadores, y la casi unanimidad es que Javier Milei es el nuevo presidente, pero los rumores también incluyen un triunfo ajustado de Sergio Massa. Todo es posible a la hora del cierre de urnas. Casi el 76% del padrón fue a votar, unas casi 23 millones de personas de las 35 habilitadas lo hicieron por una de las dos opciones o en blanco, esos que los candidatos fueron a buscar rabiosos los últimos días para intentar convencerlos, sin éxito.
Los rumores incluyen batacazos liberales y oficialistas. En Córdoba le dijeron a MDZ que Javier Milei habría hecho una elección espectacular por dos motivos: aumentó la participación y la distancia con el peronismo. Al revés, a favor de Sergio Massa empezó a correr la idea de que habían logrado llegar al 60% de los votos en Buenos Aires, lo que le da un piso de crecimiento y lo pondría al borde de la victoria.
Javier Milei votó con su hermana, relajado, se lo notó contento en un operativo con cobertura exclusiva de MDZ donde habló, soñó con terminar con "la casta" una vez más y se marchó. No hubo grandes inconvenientes, lo mismo que su competidor, Sergio Massa, quien con su mujer, Malena Galmarini, y su hijo Tomás, votaron juntos antes del mediodía en Tigre, donde tienen domicilio.
"Estamos muy tranquilos y satisfechos, hemos hecho todo el esfuerzo que podíamos hacer pese a la campaña del miedo y a toda la campaña sucia que nos han hecho. Ahora que hablen las urnas", describió Milei al salir de votar, al tiempo que agregó: "Que hable la gente, es el momento de que la gente se exprese en las urnas. Todo lo que había que hacer ya se hizo".
María Romilda Servini de Cubría dijo temprano que había gente que estaba muy agresiva: "Como funcionaria, y como empleados, está elección nos ha destruido, nos dio mucho trabajo, nunca tuve una elección de este tipo con problemas, denuncias y cosas que realmente no corresponden". Por último, lamentó que no sea una "elección positiva". "Las elecciones deben ser más tranquilas, con la gente tranquila", destacó.
Cristina Fernández Kirchner sostuvo su posición de las últimas semanas donde no hizo campaña por su espacio político ni pidió el voto por Sergio Massa más allá de una charla con Juan Grabois en el acto de su espacio político. Agradeció en Rio Gallegos el acompañamiento y aclaró que no pensaba venir a Buenos Aires, a diferencia de otras elecciones donde su espacio político ganó y viajó a festejar.