El Congreso que se viene: la vuelta de Pichetto, el posible desembarco de Manzur y el grupo de libertarios
En las 24 bancas del Senado y las 130 de Diputados que se renuevan hay figuras de la política local. Cuáles serán los nombres propios que marcarán el pulso legislativo.
El Congreso de la Nación volverá a ser una arena de disputa política. Trabado por la falta de mayorías claras, dirigentes de peso tendrán su lugar en el Palacio Legislativo para hacer sentir su proyecto de país. Entre ellos habrá exgobernadores, presidentes de partido y legisladores históricos como Miguel Ángel Pichetto, que por primera vez en sus más de 20 años de cargos legislativos ocupará una banca por fuera del peronismo.
Todavía es una incógnita quién quedará en la presidencia de cada Cámara. Estos nombres se van a definir el 19 de noviembre cuando se conozca el nombre del próximo presidente. En el Senado quedan dos opciones, los candidatos a vice de cada una de las fórmulas: Agustín Rossi por Unión por la Patria y Victoria Villarruel por La Libertad Avanza.
En caso de que gane Milei todavía la duda se traslada a también a quién estará a cargo de la Cámara baja. Pero en caso de que el peronismo retenga el poder, es posible que Cecilia Moreau continúe en el cargo, tercera en la línea de sucesión. Se trata de la dirigenta del Frente Renovador que llegó al estrado presidencial cuando Massa asumió como ministro de Economía.
La vuelta de un histórico al Congreso
Miguel Ángel Pichetto fue el jefe del bloque del peronismo en el Senado cuando Cristina Kirchner gobernaba la Argentina. Fue uno de los actores que trabajó hasta último momento por la ley conocida como “La 125” que imponía retenciones móviles a las exportaciones. También fue un aliado clave para Cambiemos durante sus cuatro años de gestión, aunque también le generó algunos dolores de cabeza, como la aprobación de una ley que fijaba el precio de las tarifas. Y después aceptó acompañar a Macri en la fallida aventura de la reelección. Ese dirigente, que hoy ocupa un cargo en la Auditoría General de la Nación, tiene asegurada una banca en la Cámara de Diputados.
Pero no es la primera vez que Pichetto tiene una banca en la Cámara baja. Fue diputado entre 1993 y 2001, durante el Gobierno de Carlos Menem. Por esos años mantuvo una relación muy estrecha con el expresidente y fue uno de los hombres clave para aprobar las reformas del Estado que impulsó el Gobierno, y que fijó la paridad peso-dólar con la convertibilidad. Por su trayectoria política es posible que tenga un lugar de relevancia dentro del bloque que vaya a integrar.
Si bien ingresa por Juntos por el Cambio, nadie sabe qué ocurrirá con el interbloque opositor en cada cámara. Con la mala elección que tuvieron a nivel nacional se consolidan como la segunda minoría y tendrán 93 diputados, 24 menos de los que hoy cuentan.
Manzur y la chance de desembarcar en el Senado
Sin cargos oficiales en el Gobierno de Tucumán, que quedará en manos de su adversario interno, Osvaldo Jaldo, Juan Manzur podría ocupar un lugar en el Senado. Para que eso ocurra, Pablo Yedlin, actual senador, debe dejar la Cámara alta y asumir la banca por la que fue electo este domingo en Diputados.
Así, “el Negro” asumiría en lugar de su amigo de la juventud porque fue el primer suplente en la lista por la que Yedlin fue electo en 2021. Sin embargo, el destino de Manzur también dependerá, en parte, de los resultados del balotaje. Su buena relación con Sergio Massa y la remontada de los votos peronistas en Tucumán, posiblemente le puedan garantizar algún lugar en el eventual Gobierno del Frente Renovador. Manzur hasta principios de año fue jefe de Gabinete de Alberto Fernández.
En Tucumán, tampoco descartan que el actual gobernador se quede en la provincia o tenga algún lugar en el Gobierno jaldista. El PJ local, puertas adentro, le reclamó a Manzur haberse ido de la provincia para ocupar un cargo en el Gobierno de Fernández y cederle de forma indirecta la llave del partido a su adversario interno.
Otros dos exgobernadores que llegan al Senado son Sergio Uñac (San Juan) y Alicia Kirchner (Santa Cruz). Los dos fueron desplazados por dos dirigentes que no tienen mucho peso propio dentro de sus provincias. En el caso del primero, Manuel Orrego estará a cargo de la provincia cuyana. Se trata de un actual diputado que no tendrá mayorías propias en su distrito ni demasiada referencia a nivel nacional. Se sumó a Juntos por el Cambio de la mano de Rodríguez Larreta, pero el futuro de la coalición cuelga de un hilo.
En Santa Cruz gobernará Claudio Vidal, un gremialista del petróleo que ni siquiera cuenta con referencia a nivel nacional, ni con legisladores propios en ninguna de las dos cámaras.
Los libertarios en el Congreso
También habrá lugar para algunas figuras que llegan a la Cámara de Diputados de La Libertad Avanza, como Ricardo Bussi, hijo del exrepresor y gobernador en democracia de Tucumán. El dirigente de Fuerza Republicana hizo campaña junto con Javier Milei y en todo momento defendió la libre portación de armas. Este espacio tendrá ocho senadores y 38 diputados.
Entre todos esos habrá lugar para Lilia Lemoine, que anticipó su proyecto de ley para que “los padres puedan renunciar a la paternidad”; para el pastor evangélico Santiago Pauli; para el ultraliberal Alberto “Bertie” Benegas Lynch; para Pablo Ansaloni que hasta 2021 era aliado de Massa (votó a favor del Aporte Extraordinario), pero ahora apoya a Milei; para Martín Menem en el Senado.