En primera persona

La bizarra realidad de votar en Argentina y Suiza el mismo día

Residentes de doble nacionalidad contaron como vivirán esta singular experiencia el 22 de octubre, donde se celebrarán comicios en ambos países.

Nicolás Montenegro
Nicolás Montenegro viernes, 20 de octubre de 2023 · 21:51 hs
La bizarra realidad de votar en Argentina y Suiza el mismo día
Tanto en Argentina como en Suiza se realizarán elecciones el 22 de octubre

"Unus pro omnibus, omnes pro uno" es una frase en latín que significa "Uno para Todos, todos para Uno". Representa el lema nacional de Suiza que simboliza la unidad y la cohesión de los 26 cantones (o entes administrativos) del país. A su vez, comparten un fuerte sentido de compromiso democrático a la hora de concurrir a las urnas. La próxima cita electoral, en coincidencia con la Argentina, será este domingo.

Actualmente, se encuentra en nuestro país la comunidad helvética más grande en Latinoamérica, en donde habitan más de 15 mil ciudadanos suizos. Muchos de ellos también tienen pasaporte argentino y se abrazaron a la doble nacionalidad. Por lo tanto, este 22 de octubre votarán en sus dos países el mismo día.

María Rosa Zenklusen nació en Santa Fe, pero actualmente vive en Córdoba. Es presidenta de la de la Sociedad Helvecia de Socorros Mutuos, una institución fundada en 1874 con el objetivo de ayudar a los suizos que llegaran al país.

Explica que la entidad, creada por ciudadanos "mayoritariamente del Cantón del Ticino", reúne a la colectividad para fortalecer vínculos con actividades que "conserven y respeten las tradiciones suizas de nuestros antepasados".

"Hubo varias corrientes migratorias desde Suiza a Argentina, que fueron organizadas y alentadas desde ambos países. En general eran familias que buscaban una mejor condición de vida. También hubo (en menor cantidad) migrantes que llegaron para instalar empresas de diversos tipos", relató Zenklusen.

Ella es bisnieta de un emigrante suizo del Simplon Dorf, en el cantón de Wallis (Valais), quien llegó a los 11 años en la segunda mitad del siglo XIX como parte de la corriente migratoria de la época.

María Rosa Zenklusen es santafesina y bisnieta de un emigrante suizo que llegó a la Argentina a mediados del siglo 19.

Otro integrante de la comunidad es Javier Ambrosini, de 34 años y descendiente de suizos por vía paterna. Cuenta que llegó como parte de la última oleada inmigratoria producto de la Primera Guerra Mundial.

"Mi abuelo es suizo-italiano del Cantón del Ticino", describe. Al ser consultado por los motivos detrás de la migración suiza a Argentina, expresó que se debe a raíz del "rendimiento monetario" del país y "la calidad de su gente".

Desde chico se integró a la entidad liderada por Zenklusen en Córdoba y empezó a participar en actividades sociales por "tradición familiar". "Todos los primeros de agosto de cada año celebramos la fiesta nacional de nuestro país, donde nos juntamos a almorzar", añadió.

Luego de recuperar su nacionalidad suiza en 2020, Zenklusen contó que participará en los dos comicios este domingo. Para la votación en la Confederación, el sistema utilizado es por correo y requiere inscripción previa ya que el voto no es obligatorio.

"Envían un sobre con las propuestas. Es una información muy completa. El mismo sobre sirve para reenviar el voto. En este caso llegó un libro con todas las boletas elegibles con los candidatos de mi Cantón", expresó.

Tanto ella como Ambrosini coinciden que uno de los inconvenientes para votar afuera es que la documentación extranjera para votar no llegue a tiempo.

En este aspecto, Zenklusen comenta que "es un tema que se está tratando" en conjunto con la Organización de los Suizos del Extranjero, una ONG que representa los intereses de casi 700 mil ciudadanos helvéticos que viven fuera de su país. De todas formas, destacó que en está oportunidad la información llegó con "la suficiente anticipación" para participar de los comicios.

Sumado a eso, Ambrosini cuenta que el pago de los costos postales "al hacerse en pesos argentinos, se encarece mucho" y se muestra molesto por la demora en el envío de los documentos, quien propuso como alternativa la votación vía mail.

"Hay una insatisfacción por parte de los suizos que residimos en el extranjero. El voto por correspondencia siempre llega tarde y es oneroso el cambio del peso al franco", completó.

Javier Ambrosini, de 34 años y descendiente de suizos por vía paterna.

Si en Argentina se decidirá el destino de quien lleve el poder los próximos cuatro años, la realidad es muy distinta en Suiza, donde se renovará un gobierno de concordancia donde el poder es compartido por los principales partidos.

Sobre el escenario político de nuestro país, Zenklusen expresó que lo considera "muy convulsionado" mientras que en Suiza se vive la previa "con más tranquilidad" ya que "no existe tanta polarización ni crispación en la campaña".

"Allá las preocupaciones actuales pasan por el medio ambiente y otros temas de actualidad en el resto del mundo, como la migración", señala.

"Acá no hay una evolución del discurso y de la ciudadanía exigiendo a los políticos cambios de esos discursos. El problema de Argentina es la falta de valores concretos en común. No hay una unicidad de objetivos a alcanzar por parte de todos los partidos políticos", señala Ambrosini como falencia.

Y marcó distancia con la ciudadanía del territorio europeo: "Se involucra mucho más. El lema de uno para todos y todos para uno se refleja mucho".

Finalmente, ambos expresaron sus sensaciones respecto de votar en dos democracias tan lejanas. Zenklusen adelantó que ya "envió su voto" a Suiza, mientras que ya tiene su decisión a quien elegirá en Argentina.

"Me resultó más fácil decidir mi voto suizo, lo hice con mayor tranquilidad. Lo que percibo en Argentina es que es una elección crucial y muy determinante del futuro del país, debido a la situación crítica que estamos atravesando", reflexionó.

En esa línea se manifestó Ambrosini, quien confesó que "le preocupa más" su voto argentino que el extranjero.

"Lastimosamente en Argentina terminamos votando por el mal menor. Los cambios bruscos políticos para un país que está en terapia intensiva no va a ser que reviva, sino que agonice más. La Argentina es mucho más joven en democracia que en Suiza", concluyó.

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