La dirigencia política piensa en 2023 y se olvida de la gestión

Mientras que Alberto Fernández encabezó un acto de la UOCRA en el Conurbano bonaerense, la mesa nacional de Juntos por el Cambio se reunió en el mismo territorio. El presidente, en Esteban Echeverría, y la oposición, en La Matanza. Sobre esto, reflexionó el analista político Paulino Rodrigues. Además, se refirió al mensaje del líder del Ejecutivo al kirchnerismo. 

"La política está discutiendo 2023 y la sociedad está viendo cómo llega a la noche", comenzó analizando el politólogo, en referencia a la visita de Alberto Fernández y de Juntos por el Cambio al Conurbano, en ambos casos con una fuerte señal política.

"El presidente habla de la interna, busca validarse en Esteban Echeverría en un acto organizado por Gerardo Martínez, el más opositor a Cristina Kirchner, y en el pago chico con Fernando Gray, que es el único que se opuso a Máximo Kirchner en su desembarco en el PJ bonaerense. Una foto política con un mensaje alrededor de Alberto Fernández".

Después, está la foto de este sábado en Mendoza, con la idea formar lazos: "Con un Urtubey que va en tren de soledad a intentar establecer puentes para convertirse en un actor de la articulación futura, en virtud de no tener un proyecto personal detrás, y con Wado de Pedro, que es el eslabón del kirchnerismo dentro del Gobierno nacional, el que trata de hacer equilibrio, en el mejor de los sentidos, entre unos y otros".

Mientras tanto, la pelea es tan grande dentro de la coalición de Gobierno que "Massa se desdibujó, perdió la centralidad. Pasamos de Massa yendo y viniendo de la casa de Cristina Fernández de Kirchner, al despacho de Alberto Fernández; al que no puede articular sesiones en el Congreso para robustecer la política oficial. De hecho, el propio presidente le tiró por elevación al presidente de la Cámara de Diputados, diciendo que 'es el Congreso el que me tiene que apoyar, si es que tomamos la decisión de aumentar retenciones', en un contexto de precios internacionales por las nubes. Lo cual, por otra parte, desataría una crisis con el campo".

Paulino Rodrigues justificó su argumentación asegurando que "estamos hablando de cómo la política reinstala posición y busca competitividad de cara a lo que va a ocurrir dentro de un año y medio -las elecciones de 2023-. Y en el medio, los padecimientos de la gente, sin la resolución de la política. Porque si los dirigentes hacen todo esto, al tiempo que aprueban una ley de alquileres hace 6 meses, como prometieron, estuviesen sintetizado las discusiones centrales en el Congreso y las estuviesen validando. Diríamos: 'Bueno, hay una alta actividad política que tiene un correlato en la gestión'. Pero, ¿dónde está la gestión?".

A partir de allí, enumeró:

• Guzmán aún no especificó qué es el impuesto a la renta inesperada, pasaron 2 meses.
• El propio Gobierno aún no establece los criterios con la precisión que se requiere sobre cómo será la quita de subsidios y la segmentación en tarifas de luz y gas.
• El propio Gobierno no pudo hacer una nueva ley de alquileres, pero tampoco pudo validar muchas de las iniciativas que Alberto Fernández había enviado al Congreso en extraordinarias, en enero.
• No pudo hacer una sola reforma en materia judicial: no logró nombrar a un integrante de la Corte, tampoco al procurador, jefe de los fiscales (aunque dice que no va a remover el pliego de Rafecas, por lo tanto no habrá jefe de fiscales, porque la oposición no lo acepta).

De ese modo, Paulino Rodrigues concluyó su columna en Uno Nunca Sabe. Para escucharla completa, podés hacer clic acá.