El alarmante número de anestesiólogos que renunció en los hospitales y de qué los acusa el Gobierno

Desde el 1 de abril pasado, 68 anestesiólogos de los 150 que tenía el sector público no renovaron sus contratos. En términos de servicio de salud, implica 84 lugares que se han perdido y por lo tanto, que se resintió la atención en los hospital estatales. Desde el Gobierno de Rodolfo Suarez aseguran que estos trabajadores “extorsionan” porque no quieren aceptar menos del 50% que piden de aumento de sus prestaciones y desde los anestesiólogos autoconvocados desmienten ese argumento y reclaman una reunión urgente para dialogar "como ocurre en otras provincias".

Los contratos vencían el 31 de marzo pasado y los anestesiólogos le advirtieron al Gobierno un mes antes, que si no les actualizaban las prestaciones, iban a irse. El Gobierno les ofreció un 40% más un adicional por zona pero no fue suficiente. Entonces estos profesionales dejaron de ir a trabajar y la ministra de Salud, Ana María Nadal, prometió hace diez días que habría una reunión pero en esas mismas declaraciones públicas los calificó de tener prácticas extorsivas.

Es por eso que las negociaciones están totalmente frenadas: los anestesiólogos aguardan un encuentro con Salud y los funcionarios del área dicen que quieren una señal del grupo de que serán proclives a volver a trabajar por el ofrecimiento que ya hizo la gestión y que  profesionales de la salud de otras especialidades aceptaron.

"Nosotros no hemos hablado de aumento concreto sino de propuestas que tienen que ver con la distribución del recurso humano. Desde hace años hemos estado pidiendo que los distintos gobiernos entiendan que queremos colaborar como pasa en otras provincias que tienen resueltos este problema con anestesia. Es mentira que nosotros les pedimos un 50% o nada. Mezclan todo con todo. Desde que presentamos la nota el 27 de febrero esperamos una reunión y la única que tuvimos fue el 31 de marzo pasado y nunca más nos volvieron a llamar", sostuvo Arturo Salassa, vocero de los anestesiólogos autoconvocados.

Uno por uno: la situación de cada hospital

De acuerdo a un relevamiento hecho por los anestesiólogos y al que accedió MDZ, en el hospital pediátrico Humberto Notti renunciaron 18 prestadores. En el hospital Central, hubo 7 renuncias. De acuerdo a los anestesiólogos, esta situación generó que se suspendiera el 50% de la actividad quirúrgica programada y el refuerzo de guardia de 14 a 20,  causando demoras en la realización de cirugías urgentes.  

En el hospital Lagomaggiore hay 17 prestadores que se fueron. Según los trabajadores, los médicos anestesiólogos de planta dejaron sus   horarios habituales de trabajo y comenzaron a realizar guardias los días de semana y fines de semana . Se cerraron 3 de los 5 quirófanos y los procedimientos de gastroenterología se vieron disminuidos a solo 1 día a la semana (anteriormente funcionaba todos los días).Se suspendieron cirugías generales, urológicas, ginecológicas, traumatológicas, neurocirugías, etc .En el hospital Perrupato (San Martín) hay 11 renuncias y según el relevamiento, 1 solo quirófano por día de cirugías programadas más la guardia en un hospital con obstetricia y maternidad que requiere "al menos dos profesionales de anestesia disponibles para urgencias y emergencias", aseveran los anestesistas

 En hospital Paroissien, (Maipú),la renuncia de 11 prestadores generó que los anestesiólogos de planta, incluido el jefe de servicio tuvieran que dejar sus horarios habituales de trabajo y pasaron a hacer guardias los fines de semana Se cerraron 3 de los 4 quirófanos con los que cuenta el hospital, priorizando la atención de urgencias obstétricas, cesáreas programadas y pacientes oncológicos.

En el hospital Scaravelli (Tunuyán), se fueron 6 prestadores. Esta situación ha disminuido el número de cirugías programadas a la mitad, solo se están realizando urgencias  y el resto se está derivando al Gran Mendoza, según dicen los anestesiólogos. El hospital Schestakow de San Rafael han renunciado 7 prestadores y por lo tanto, se ha resentido del 90 al 100% de las cirugías programadas. "Hay una lista solamente de cirugía general de cerca de 1200 pacientes que esperan ser operados a los cuales hay que sumar otro tanto de cirugías pediátricas pospuestas. Muchas de las cuales la demora implica un agravamiento o un aumento del riesgo en la salud de los pacientes", aseguran los profesionales de anestesiología.

Por último, en el hospital Saporiti  (Rivadavia) hay 4 prestadores fuera del sistema y sólo queda 1 médico de planta que es el único que tiene a cargo. "Era un servicio nuevo que estaba empezando a funcionar en el Este para dar soluciones a un sector de la población que ha quedado sin la posibilidad de recurrir al hospital para resolver su atención, quedando algunos días descubiertas incluso las urgencias", sostienen estos profesionales.