Tensiones en la definición del compañero de fórmula de Anabel

Se acelera la rosca en el justicialismo camino a la definición de candidatos para las PASO. A 20 días de la fecha tope para presentar las listas, hay un nombre confirmado que no es ninguna novedad. Pero las intrigas y deliberaciones sobre el otro nombre son cada vez mayores.

Hace meses que se sabe que Anabel Fernández Sagasti será candidata a la reelección en el cargo de senadora nacional. Pero, a la par, se estira la indefinición sobre quién liderará la boleta en la categoría de los diputados nacionales.

El dilema en el PJ sigue. Hace tiempo que La Cámpora ha tirado el anzuelo para captar a alguno de los intendentes del partido para el puesto vacante, pero el asunto no se ha definido aún.

El peronismo tiene seis jefes comunales, pero sólo tres están en su último mandato, de acuerdo con la enmienda que les impide tener más de una reelección. De los tres intendentes "disponibles" para ser candidatos a diputados nacionales, porque no pueden volver a competir por la intendencia de sus distritos en 2023, el más pretendido es Emir Félix, de San Rafael. 

Si Félix fuera candidato a diputado nacional, estarían a salvo tanto los equilibrios internos (el sanrafaelino es el único "rival" interno de Fernández Sagasti en Mendoza) como probablemente las aspiraciones de votos en el cuarto distrito electoral. Pero el cacique demora e incluso descarta, según su entorno, una candidatura este año.

El juego, entonces, se abre. El intendente de Lavalle, Roberto Righi, no ha sido claro en sus pretensiones para este turno electoral. Queda entonces solamente uno en la lista: Martín Aveiro, de Tunuyán.

Aveiro, a diferencia de sus colegas que ya se reeligieron y no podrán ser intendentes otra vez, nunca ha negado la posibilidad de ser candidato a diputado nacional este año. Pero tampoco es número puesto, ya que las encuestas ponen en carrera también a algunos "no intendentes" del peronismo.

Uno es el senador provincial Adolfo Bermejo, que es impulsado por el intendente de Maipú, su coterráneo Matías Stevanato. Bermejo es un histórico que "siempre mide bien" en las encuestas y que parece estar dispuesto a asumir la candidatura.

Sin embargo, también podría acompañar a Fernández Sagasti en las listas el hermano de Emir Félix, Omar, cuya banca de diputado nacional se vence este año.

Pero la vidriera electoral del justicialismo no termina allí. Hay otro dirigente en la mira, un extrapartidario, que asoma como potencial candidato a diputado nacional: José Luis Ramón, de Protectora.

A diferencia de las elecciones de 2019, cuando casi quedó como candidato a vicegobernador del peronismo pero no lo dejaron entrar, hoy nadie en el justicialismo bloquea su integración a las listas y hay quienes dicen que hasta podría ser el compañero de fórmula de Anabel.

Esto tiene una razón. El capital político de Ramón ha crecido dentro del PJ. Sergio Massa y Máximo Kirchner le han concedido un protagonismo alto desde su banca de diputado nacional. 

Con la sanción de la ley de zonas frías, que habilitó descuentos para toda Mendoza en el servicio de red de gas natural, pasó de ser un simple aportador de quorum (un rol operativo clave para Massa y para el desempeño del oficialismo nacional en la Cámara de Diputados) a tener brillo político propio.

Es curioso. Ramón cuenta hoy con un respaldo en el justicialismo mayor a su imagen pública. El PJ lo descartó en 2019, cuando medía más que ahora, pero en este turno electoral, le abre las puertas. 

Dicen en el peronismo por estos días que el hombre de la frazada, cuyo mandato como diputado también se acerca al final, tendrá un lugar en el oficialismo, ya sea en las listas de candidatos o como funcionario del Gobierno nacional.

En cuanto a su posible desempeño, en el peronismo mendocino lo creen dueño de un capital en votos equivalente a entre 3 y 5 puntos, más allá de los apoyos que perdió cuando decidió dejar de ser un legislador independiente para integrarse tácitamente al kirchnerismo.

El crecimiento de Ramón ha provocado algunas reacciones en el peronismo orgánico. El PJ de San Rafael habría llegado en las últimas semanas, por carriles ajenos a La Cámpora, al propio Máximo Kirchner para manifestarle la pretensión de que "algún Félix" quede en la lista de candidatos de las elecciones de este año.

Cualquiera sea el resultado de estas conversaciones, la cúpula del PJ descarta quiebres internos camino al armado al armado de las listas. 

Hay confianza también en la tracción de la candidata segura, Fernández Sagasti: sus adherentes afirman que tiene más apoyo en Mendoza que Alberto Fernández. 

Algunos sondeos, no obstante, advierten que Anabel no supera la barrera de los 30 puntos, por debajo de los votos que consiguió en 2019 y poco para aspirar a dar un batacazo en la próxima elección.