Cierran más actividades y suman restricciones en el AMBA

El ministro de Salud de la Provincia de Buenos Aires, Daniel Gollán, describió que “los contagios por COVID bajaron en el AMBA”.  pero el intendente de Tigre, Julio Zamora, dispuso el cierre de todas las actividades a cielo abierto y agudizó su control sobre todos los espacios cerrados tras llegar al pico de las camas de terapias intensivas utilizadas en la actualidad.

En su habitual conferencia de prensa de los días martes, Gollán describió que “estos últimos días hubo una baja de casos, y esperemos que siga así”, pero cruzó a su par porteño, Fernán Quiroz, para quien “nos encontramos en un amesetamiento de casos. Alto, pero amesetamiento”.

“Estamos arriba de la punta del Aconcagua”, describió el ministro bonaerense, nada de amesetamiento alto, pero vemos que los casos no han subido, sino bajado levemente en el conurbano. Eso sí. Los casos van subiendo en el interior de la Provincia, como sucedió el año pasado”, alertó.

Por su parte Zamora había adelantado que veía viendo un cuadro “muy delicado” de la situación sanitaria en su distrito hace quince días y esa tendencia no se revirtió sino que se profundizó.

El primero que había alertado sobre el colapso sanitario había sido su vecino Ariel Sujarchuk, de Escobar, quien a principio del nuevo brote de COVID impulsó y apoyó las medidas restrictivas solicitadas por el gobernador Axel Kicillof al presidente Alberto Fernández. Ambos intendentes expusieron su situación por redes sociales.

Por quince días, en Tigre, estarán prohibidas todas las actividades comerciales a cielo abierto, incluido el Puerto de Frutos, lugar emblemático de la zona norte donde, por fin de semana, llegan miles de turistas y consumidores para pasear por la costa norte.

En un mensaje difundido por redes sociales, Zamora informó que estas medidas “son para afrontar este momento sin precedentes, donde en promedio mueren siete vecinos por día, los contagios crecieron un 165% en los últimos veinte días y ya hay 300 casos diarios”.

“No hay una sola cama de terapia intensiva disponible en el sector público y privado del municipio”, recalcó el intendente. En diálogo con MDZ, Zamora recalcó que “tenemos camas supernumerarias. Tenemos personal para 12 camas y se están utilizando 16 camas por cada efector municipal. Estamos vigilando todos los protocolos comerciales, el aforo en los supermercados y el cierre de todos los espacios a cielo abierto por quince días”.

Por su parte Sujarchuk también salió hoy con un mensaje en redes sociales en la que expone que “si no modificamos nuestras actitudes individuales y colectivas los contagios seguirán siendo muy altos”.

Al igual que lo que realizaba Alberto Fernández al inicio de la pandemia, el intendente de Escobar se apoyó en gráficos y filminas para demostrar que hace quince días “ya nos encontrábamos 35% por encima de los contagios del pico de 2020 y hoy ya estamos en un 76% por encima del año pasado”.

En su mensaje también sumó al director del hospital provincial Enrique Erill y a su secretario de Salud, Juan Ordoñez. Este último expresó que se duplicaron los casos diarios de nuevos enfermos con COVID y su cifra es similar a la de Tigre, 330”.

“En sintonía con lo que dispusieron el presidente y el gobernador en Escobar readecuamos todos los centros sanitarios y ampliar la capacidad de camas de contingencias”, informó Sujarchuk.

En todos los municipios hay diferentes niveles de preocupación. Estas dos localidades, junto con San Fernando, son municipios que no tenían la robustez sanitaria municipal y provincial que tienen otras localidades de la región, como San Martín, Pilar, Malvinas Argentinas, San Miguel, San Isidro y Vicente López.

La nueva pandemia los hizo robustecer drásticamente sus prestaciones, pero esta segunda ola los encuentra con los faltantes que tienen el resto de las localidades de AMBA, que extreman la prestación con la duplicación del trabajo de sus médicos y auxiliares.

Hoy a la mañana, el ministro Gollán, mostró que el sistema estuvo ocupado en un 70% en las camas de UTI, pero en esta segunda ola se duplicaron los casos con lo cual es esperable que se ocupen todas las unidades”.

El funcionario describió que los casos se han estabilizado durante la última semana, que en casos fueron similares pero que ahora hubo más en el interior de la provincia en desmedro del conurbano. “En el AMBA hubo un descenso y un crecimiento en el interior. Este fin de semana hubo una baja de casos importantes, y la sensación es que hay una estabilización en la punta del Aconcagua, no una meseta alta”.

La tensión en el sistema sanitario es creciente, y a pesar de los incesantes llamados entre los intendentes, no hay una única mirada. Para peor, la mayoría desconfían de la mirada extrema  que siempre expone el gobernador Axel Kicillof, con quien nunca hay confianza plena.