Alberto Vivero reconoció que agredió a Fernando Iglesias: "Fue un pequeño empujón"

Antes de que se aprobara el proyecto para modificar el impuesto a las ganancias en la caliente sesión que se llevó a cabo el sábado en la Cámara de Diputados, el diputado de Juntos por el Cambio Fernando Iglesias denunció que el diputado del Frente de Todos Alberto Vivero lo empujó e intentó agredirlo físicamente.

Este lunes Vivero reconoció la agresión aunque la minimizó asegurando que se trató de un "pequeño empujón". "Fue un intercambio bastante fuerte que terminó con un pequeño empujón. Quería que la corte con ese alto nivel de agresión", justificó el legislador del Frente de Todos.

"Fue parte de una fuerte discusión que mantuvimos en un pasillo, donde yo le exijo que corte con este alto nivel de agresión que manifiesta sobre las mujeres de mi bloque, que no necesitan que nadie las defienda, pero que llega un momento que se hace insostenible", recordó Vivero.

Y agregó: "Discutimos fuertemente también en estas cuestiones donde vocifera permanentemente en contra de mi espacio político, en contra de quien conduce mi espacio político como es el caso de Cristina Kirchner".

"Fue una discusión subida de tono, como cualquier discusión política subida de tono después de 20 horas de sesión y de provocaciones. Fue un intercambio bastante fuerte que terminó con un pequeño empujón como uno diciendo ‘salí de acá' y ahí terminó la cuestión", explicó el diputado neuquino del Frente de Todos en diálogo con Radio 10.

Vivero agregó que las discusiones con "un provocador de estas características llevan a estar al límite de cualquier equilibrio", aunque aclaró que "afortunadamente no pasó absolutamente nada y no hubo ninguna agresión".

"No estoy haciendo una justificación del accionar que determinará la comisión, pero tengo la tranquilidad de que no hubo ninguna agresión física como él manifiesta, hubo un simple empujón que tiene que ver con terminar una discusión que fue de alto voltaje como cualquier discusión donde uno hace recriminaciones y la otra persona fundamenta y justifica su accionar y termina ahí", completó Vivero.