La estrategia secreta de Alberto Fernández para recuperar el voto indeciso

Desde hace días en la Casa Rosada analizan números de encuestas pensando en las elecciones legislativas. El presidente Alberto Fernández a condicionado su reelección en el 2023 a un triunfo en los comicios de medio término, por lo que intenta diagramar un plan que permita repuntar la intención de voto del oficialismo. Esa estrategia contempla mejorar "el bolsillo" de los argentinos.

Subas de salarios y jubilaciones sumado a un intento de congelar los aumentos de precios tienen un único objetivo: conseguir un humor social que repercuta en el caudal de votos.

Se calcula que un 18% del padrón puede posicionarse como "indeciso" o al menos es un voto blando que no está volcado a la famosa grieta. Hoy en día, las encuestas marcan que no acompañarían al oficialismo pero en el gobierno confían en revertir esa situación mejorando algunas variables económicas que impactan directamente en el bolsillo de la ciudadanía.

Pero además de subir salarios o mejorarlos modificando el mínimo no imponible de impuesto a las ganancias, planean aumentar la confianza en el manejo de la pandemia con una importante campaña de vacunación.

El objetivo es tener al menos 1.700.000 dosis en marzo y darle envión a una campaña que ha arrancado temprano pero de forma incipiente. En las últimas semanas, países que estaban relegados respecto a la vacunación pudieron acelerar convenios y hoy superan ampliamente a Argentina.

Una campaña de vacunación masiva y efectiva podría convertirse en un éxito político que el oficialismo procura capitalizar en la campaña del Frente de Todos.

Otro eje del plan es conciliar aumentos con los sindicatos para que reine un clima de optimismo. “Mi intención es que los salarios le ganen a la inflación. Y por eso la convocatoria es a todos los sindicalistas representativos”, comentó el Presidente en Olivos.