Vandalismo al monumento

Horacio Rodríguez Larreta y las piedras de la traición

Dice Drexler: «en tren con destino errado se va más lento que yendo a pie». La frase aplica al jefe de Gobierno de CABA con su insistente proyecto —acunado con su íntimo amigo, Sergio Massa— de unir al 70% de la política argentina en un único proyecto.

José Luis Jacobo
José Luis Jacobo lunes, 18 de octubre de 2021 · 17:32 hs
Horacio Rodríguez Larreta y las piedras de la traición
Foto: Prensa Cambia Mendoza

El jefe de Gobierno de CABA, señalado por los medios capitalinos como un político que «se para como dirigente nacional», o líder de Juntos por el Cambio, se dio de narices con el vandalismo que, en oportunidad del 17 de octubre, una facción peronista desató sobre el homenaje a los fallecidos por covid-19 en nuestro país.

A horas de ocurridos estos sucesos indignantes, la reacción de Rodríguez Larreta fue una tenue declaración a través de su cuenta de Twitter: «Lo que pasó hoy en Plaza de Mayo indigna y angustia. Mi solidaridad con los familiares que, con mucho amor y mucha tristeza, habían homenajeado a sus seres queridos. Esto traspasó todos los límites. El respeto tiene que ser la base de toda sociedad».

Poco después, llegó la fulminante respuesta desde Casa Rosada: presentaron la orden de servicio del día, donde queda en claro que, la responsabilidad de custodiar la zona, era de la policía de la ciudad.

Por otro lado, el sector que lidera Mauricio Macri y cuya poderosa voz se expresa, entre otros, en Patricia Bullrich, a minutos de ocurrido este avasallamiento ese sector que los medios denominan como «halcones» se expresó, indicando: «Pisotean las piedras en memoria de quienes ya no están, Isaurralde insulta a Macri y el ministro estrella del gobierno sigue con sus amenazas mafiosas. Mientras tanto, Massa ofrece diálogo. Ni con señales de humo se puede hablar con esta gente. ¿Ustedes son de la campaña del sí?».

Rodríguez Larreta, buscando mantenerse fiel a los conceptos que se propusieron en la década del ’80 desde la Fundación Grupo Sophia, ve cómo estos hechos lo alejan de su idea de ser el líder de un gran acuerdo político que lo tenga a él como líder, en sociedad con aquellos que imaginan un peronismo moderno, pero que mantenga los privilegios de la nomenclatura que se siente la dueña del país.

Las piedras, que son el símbolo del dolor de millones de argentinos, fueron profanadas. Tal como expuso el gobierno nacional, la responsabilidad institucional por este hecho, la tiene el jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires. No hay palabras que tapen los hechos. Ni a pedreadas.

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