Rechazo político a la queja policial frente a la residencia de Olivos

La protesta policial frente a la residencial presidencial de Olivos generó repudio en distintos sectores políticos, algunos de ellos, opositores.

Los patrulleros rodearon la quinta e hicieron sonar sus sirenas para expresar su malestar ante la falta de precisión sobre la suba salarial que anunció el gobierno de Axel Kicillof. También agitaron banderas en su ingreso.

"A favor de las legítimas reivindicaciones de la #PolicíaBonaerense En contra del reclamo frente a la Quinta de Olivos. No es el lugar", expresó el diputado del PRO Fernando Iglesias.

"La quinta de Olivos no es el lugar donde el personal de la policía de la Provincia de Buenos Aires debe hacer sus reclamos. Este accionar genera incertidumbre y preocupación. No es el momento, el lugar ni el modo", sumó el diputado radical Facundo Suarez Lastra.

"Reivindico y apoyo el reclamo legítimo de la policía bonaerense por mejores condiciones laborales. La Residencia de Olivos, no es el lugar. La Democracia con su Constitución es el primer pacto que tenemos que respetar y cuidar", escribió en Twitter el diputado radical mendocino Luis Petri.

"Es inadmisible ir con armas y patrulleros a la Quinta de Olivos para condicionar a un gobierno electo democráticamente que mostró total voluntad de resolver los problemas a través del diálogo", afirmó por su parte Martín Insaurralde, el intendente justicialista de Lomas de Zamora.

"El reclamo salarial de la policía bonaerense es comprensible. No lo es el clima de patoteada e insubordinación en medio de la pandemia", expresó, por su lado, el senador peronista Jorge Taiana.

Antes, había existido un reproche de la senadora mendocina Anabel Fernández Sagasti, quien también forma parte del oficialismo. "Lamentablemente tengo la sensación de que hace más ruido el silencio de la mayoría de la oposición, que las sirenas y bombas molotov que intentaron arrojar los policías", expresó.