Afirman que el castigo de Axel Kicillof a Tandil es "una canallada"

El gobierno de Axel Kicillof determinó no incluir a Tandil en el Fondo de Reactivación para la Cultura y el Turismo en castigo por no haberse adecuado al sistema de fases para el control del coronavirus. Esa decisión motivó el repudio de la UCR, que salió a defender al intendente Miguel Lunghi y cuestionaron con dureza al gobernador de Buenos Aires.

Tandil adoptó un criterio propio y autónomo para la habilitación de permisos con un esquema se conoció como “semáforo”. Eso enojó al gobernador Kicillof, que se tomó revancha dejando afuera del fondo económico a Tandil.

 El ministro de Producción Augusto Costa informó ayer que el mencionado fondo -que cuenta con un presupuesto de 300 millones de pesos- no alcanzará a Tandil. Puntualmente, establecieron como requisito para acceder a ese dinero  cumplir con las normas sanitarias elaboradas por la Provincia y la Nación para combatir la pandemia.

“Este accionar nos demuestra la peor cara de la conducción del Estado Provincial. Es la pretensión de dirigir la provincia de una manera centralista, punitiva y con una mirada política unilateral, no es sólo un avasallamiento a la autonomía municipal, es un atropello a la población”, manifestaron desde el bloque de la UCR bonaerense a través de un comunicado.

"Manejar los recursos con discrecionalidad es marca registrada del kirchnerismo", afirmó por su parte Alfredo Cornejo y dijo que decidir sacarle recursos a Tandil es "una canallada del gobernador mimado de Cristina Kirchner".