Pandemia

Hay 30 mil empleados públicos que siguen sin ir a trabajar

Desde la Asociación de Trabajadores del Estado aseguraron que el 70% de los empleados ya se han reincorporado a sus funciones y aclaran que muchos, como los empleados de la Salud, nunca dejaron de trabajar. La cifra incluye a quienes realizan teletrabajo.

Mariano Bustos
Mariano Bustos viernes, 26 de junio de 2020 · 12:02 hs
Hay 30 mil empleados públicos que siguen sin ir a trabajar

La pandemia ha impactado tanto en el sector público como en el sector privado. Sin embargo, las realidades son distintas y el contraste es notorio. Para evitar despidos gremios privados han acordado rebajas salariales para los trabajadores que no están yendo a sus empresas e incluso a pesar de ello el desempleo sigue creciendo. Mientras tanto, en el sector público aún hay un 30% de trabajadores que siguen sin ir a trabajar y no solo cobran íntegramente su salario sino que además los sindicatos estatales están pidiendo que se reabran las paritarias para discutir aumentos y presionar para que el aguinaldo no se pague de forma escalonada.

Según expresaron desde ATE, al inicio de la pandemia sólo trabajó el 45% de la planta estatal. La realidad variaba por sector, ya que en áreas como Salud el 100% de los empleados siguieron trabajando, mientras que en otras como Administración Central la mayoría no continuó con sus labores o en su defecto lo hizo desde el hogar.

A pesar de esa situación el Estado siguió funcionando, se perfeccionaron las plataformas digitales, los trámites online y se dieron avances que quizás, en un contexto de normalidad, hubiesen llevado mucho más tiempo en perfeccionarse. De a poco, los trabajadores se fueron reincorporando y según ATE hoy el 70% de los trabajadores ya está trabajando. Algunos de forma presencial y otros desde casa.

Esto quiere decir que hay un 30% de los más de 100 mil empleados públicos de la provincia que no están trabajando. Ya sea porque están en grupo de riesgo, porque no tienen con quién dejar sus hijos o -sencillamente- porque no se les ha pedido ninguna tarea. Y los porcentajes aumentan aún más en organismos nacionales con sede en Mendoza.

Desde el gobierno aclaran que la situación es dispar y no es fácil hacer un porcentaje preciso. Para empezar destacan que la mitad de los empleados estatales son docentes y que todos han estado trabajando de forma virtual desde el inicio de la pandemia. Mientras tanto, entre Salud y Seguridad suman el 35% de la planta estatal y también han estado trabajando desde el primer día de cuarentena y lo han hecho de manera presencial.

En cuanto a lo que respecta a los trabajadores de la Administración Central y entes descentralizados, desde el Ministerio de Gobierno esgrimen que es complejo dar a conocer un promedio de quiénes están trabajando porque el número varía según cada dependencia. Es decir, cada ministerio sabe cuántas personas trabajan presencialmente, cuántos desde la casa y quiénes no están trabajando.

Si bien desde hace años existe una intención de centralizar los datos en un registro unificado de Recursos Humanos, la gestión de Alfredo Cornejo no pudo concretar ese anhelo y en el gobierno de Rodolfo Suarez estiman que el año que viene podría estar listo. Hasta que eso ocurra, los datos seguirán dispersos.

Diferencias sustanciales

Mientras tanto, en el sector privado ocurre lo mismo pero con condiciones muy diferentes. Rebajas salariales han sido acordadas por gremios a cambio de que no haya despidos y a pesar de ello el desempleo sigue aumentando. Los trabajadores no saben si cobrarán el aguinaldo en cuotas o si, directamente, no lo percibirán. Quienes no están yendo a trabajar no están tranquilos en casa esperando que los convoquen, sino que aguardan temerosos de recibir la peor noticia.

A eso se suma otro factor importante. En los últimos dos años la inflación fue erosionando el poder adquisitivo de los trabajadores del sector privado. Mes a mes fueron perdiendo poder adquisitivo con aumentos salariales que en contadas excepciones lograron alcanzar los índices del aumento de precios. Sin embargo, en el sector público la cláusula gatillo garantizó aumentos cercanos al 50% para los empleados estatales.

En su discurso del 1 de Mayo el gobernador Rodolfo Suarez dedicó algunos párrafos a marcar los privilegios con los que cuentan los trabajadores del Estado. "Gozan de salarios en promedio un 30% superior a los que se registran en el sector privado y de una estabilidad laboral superior, sin riesgo de quiebra por parte de su empleador, que es el Estado provincial", subrayó.

Incluso en aquel momento manifestó que el gasto de personal representa el 54% de las erogaciones y que se paga con el dinero de los contribuyentes. "Sabemos que los contribuyentes hacen un notable esfuerzo para financiar la estructura del Estado, en particular el pago de los salarios de los empleados públicos" dijo Suarez y agregó que "es innegable el aporte de los empleados públicos para garantizar la calidad y disponibilidad de los servicios públicos, pero igualmente importante es el empleo privado como fuente de sostén de la mayoría de las familias mendocinas".

Archivado en