Un senador peronista quedó envuelto en un escándalo de coimas
El exfiscal Gustavo Ponce Asahad reconoció que cobró coimas de un empresario del juego clandestino y dijo que el intermediario fue el jefe del bloque del peronismo en la Cámara de Senadores de Santa Fe, Armando Traferri.
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Desde el entorno del legislador dijeron que se va a poner a disposición de la justicia y que presentará un escrito a los fiscales que instruyen la causa: Matías Edery y Luis Schiappa Pietra.
Por otro lado, la jueza Eleonora Verón que analizará grabaciones aportadas por el exfiscal. Tiempo atrás, varios senadores fueron denunciados por el manejo irregular de subsidios beneficiando a una fundación que funcionaba en la oficina de Traferri. Sin embargo esa investigación nunca prosperó porque los fiscales que la impulsaban fueron desplazados por el fiscal regional Patricio Serjal. Este último, está preso desde agosto acusado de cobrar coimas junto a Ponce Asahad.
Mientras que la Legislatura tiene que analizar los audios que comprometen a Traferri, el senador se defiende afirmando que hay una "campaña de desprestigio" en su contra y apunta contra el ministro de Seguridad Marcelo Saín como el impulsor de la misma. "Aquí hay una maniobra política nítida, la política se ha mudado al escenario del Poder Judicial y al Ministerio Público de la Acusación", escribe Traferri que quedó involucrado en la investigación por una red de juego clandestino que se desprende de otra causa vinculada al narcotráfico.
En concreto, el empresario Leonardo Peiti quedó vinculado a la banda narco de Los Monos, gracias a escuchas telefónicas que demostraban que Peiti era extorsionado por los criminales y que el empresario manejaba el juego ilegal en el sur de Santa Fe.
Pero todo dio un giro de 180 grados cuando Peiti declaró como arrepentido y dijo que todos los meses les pagaba 5000 dólares a los fiscales Gustavo Ponce Asahad y Patricio Serjal.
Ponce Asahad declaró el viernes pasado e involucró a dirigentes políticos como Traferri en el complejo entramado ilegal.
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