Los tres cambios de Cristina para la nueva fórmula jubilatoria

De forma imprevista, los senadores del Frente de Todos modificaron en buena medida el proyecto enviado por el presidente Alberto Fernández que establece la nueva movilidad jubilatoria, lo que implicó al menos tres modificaciones que van a contramano del plan del ministro de Economía, Martín Guzmán, para reducir el gasto previsional.

La orden provino directamente de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, que aplazó en un día el tratamiento del proyecto en comisiones y especificó los cambios que quería aplicar en la futura fórmula de cara a las críticas que recibió la iniciativa incluso dentro de su propio espacio político.

Además de eliminarse la cláusula que descontaba en marzo próximo el 5% de aumento que se dará a los jubilados en diciembre, el bloque del kirchnerismo en la Cámara alta dispuso volver a las actualizaciones trimestrales y modificar parte de los parámetros que determinarán el porcentaje de ajuste en los haberes.

En primer lugar, se fijó que la suba del 5% que otorgará el Gobierno nacional este mes a los jubilados no será "a cuenta" de la que se otorgue en marzo, dado que esta medida impulsada a último momento por Guzmán para sostener las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI), había caído muy mal no solo en la oposición, sino además en amplios sectores del oficialismo.

"Tomar el aumento del 5% en diciembre por decreto como anticipo de marzo, era algo escandaloso, porque significaba sacarle un trimestre a los jubilados. Esto lo hizo el Gobierno de Mauricio Macri cuando cambió la fórmula, lo que significó juicios contra la Anses que llegaron a la Suprema Corte de Justicia y terminaron saliendo con fallos en contra de esa quita", recordó el periodista Maxi Montenegro en el programa Animales Sueltos, del canal América.

El segundo cambio relevante es que se dejó de lado la idea de aplicar la fórmula de movilidad jubilatoria en forma semestral, es decir en marzo y septiembre, y se tomó el esquema de la anterior fórmula de Macri para que los aumentos sean trimestrales (marzo, junio, septiembre y diciembre), lo cual podría relativizar la pérdida del poder adquisitivo de los jubilados y pensionados durante el año.

Finalmente, el tercer y menos conocido cambio impulsado por Cristina Kirchner refiere al parámetro de los salarios para fijar el porcentaje de actualización. Mientras que el proyecto original de Guzmán contemplaba dejar al Ripte como único índice salarial, ahora se tomarán dos indicadores: el Ripte y el Índice de Salarios del Indec, para que el más alto sea el que se use junto con el porcentaje de recaudación como parámetro de ajuste de los haberes.

"De todas formas, esta nueva fórmula mantiene el tope de gasto previsional, es decir, que los aumentos no pueden superar el 3% de aumento en la recaudación previsional, una regla de oro que había sido negociada con el FMI", expresó Montenegro.