Elecciones 2019

A Macri le preocupa el efecto del dólar sobre la inflación y los salarios

El mandatario, al contrario de lo que dice el discurso oficial, está muy preocupado por el precio de la divisa y por el impacto que podría tener en los precios y también que se comprometa la recuperación salarial.

lunes, 11 de marzo de 2019 · 10:16 hs

A pesar del discurso del Gobierno bajándole el perfile a la situación del dólar, lo cierto es que en Casa Rosada están preocupados por lo que sucederá con la divisa estadounidense en medio de la campaña electoral.

Según indica Liliana Franco en un informe de Ámbito, Mauricio Macri está preocupado y frecuentemente consulta con varios economistas y exfuncionarios.

Lo que responden preocupa aún mas al mandatario porque el titular del BCRA, Guido Sandleris, debe decidir a qué apuntará en los próximos meses. Si decide mantener la competitividad del tipo de cambio no sólo significaría que eso se traspase al aumento de los precios y por ende a la inflación, sino que también comprometería la recuperación salarial. El año pasado los sueldos promedio perdieron por encima del 10%, pero hay sectores en los que se perdió casi el 30% del poder adquisitivo. Todo ese panorama se daría en vísperas del proceso electoral, lo que podría afectar las pretensiones de reelección de Macri.

En el caso que no se decidiera un ajuste -desde abril- para de la banda de intervención cambiaria por debajo de la inflación, esto provocaría retraso en el tipo de cambio y, consecuentemente, aumentaría el riesgo de una mayor presión de demanda sobre el dólar.

Entre los especialistas indican que un dólar que se mueva por debajo de la inflación es seguro una desgracia futura.

Con ese dilema sobre la mesa por ahora el Banco Central tiene limitado su margen de acción en virtud de los rígidos límites de intervención establecidos en el acuerdo con el FMI. 

En el Gobierno confían en que con los desembolsos del Fondo y los ingresos de la próxima cosecha gruesa – unos 7.000 millones de dólares adicionales- se contará con suficientes dólares como para hacer frente a la eventual presión de demanda.

Una solución sería que el FMI acepte cambios en el acuerdo para darle mayor margen de intervención al Banco Central y ajustar la banda de flotación que consideran muy "ancha".

Sin embargo, según indica Ámbito, “difícilmente el Fondo acepte esto, sería reconocer que estaban equivocados y ese no es su estilo”.