Fuerte olor puso en alerta a efectivos de Gendarmería durante un control: qué hallaron

En un operativo de rutina realizado por una patrulla de la Gendarmería Nacional en una carretera que conecta Salta y Tucumán, se desmanteló una operación de tráfico de drogas que involucraba una carga clandestina de cocaína de máxima pureza. El procedimiento, llevado a cabo anoche por efectivos de la Sección "Joaquín V. González" del Escuadrón 45 "Salta", se materializó en el kilómetro 35 de la ruta provincial Nº30, en el departamento de Anta.

Según las fuentes de la fuerza de seguridad federal, la patrulla realizaba controles de rutina cuando detuvo la marcha de un Volkswagen Gol Trend que se dirigía hacia Tucumán. El conductor, un hombre mayor de edad, levantó sospechas debido a un fuerte olor característico, lo que llevó a los gendarmes a inspeccionar minuciosamente el vehículo.

Al golpear debajo del tanque de combustible, los efectivos notaron un sonido anómalo, lo que los llevó a desmontar el asiento trasero para acceder al compartimiento. Descubrieron una ingeniosa técnica: ladrillos de cocaína, envueltos cuidadosamente en film plástico y sumergidos dentro del combustible del tanque de nafta del automóvil. La detección condujo a la inmediata detención del conductor.

Bajo la mirada de testigos, los gendarmes extrajeron 14 paquetes, revelando un total de 15,109 kilos de cocaína de máxima pureza. La Unidad Fiscal de Salta de la Justicia Federal tomó intervención tras el operativo y ordenó el decomiso de la droga, del vehículo, de un teléfono celular y de otros elementos de interés para la causa. El conductor quedó detenido, enfrentando cargos por infracción a la ley N° 23.737 de estupefacientes.