El sorpresivo giro que podría tener el caso de la modelo brasilera muerta en Retiro

El papá de la modelo brasilera Emmily Rodrigues (26), quien murió al caer del departamento del empresario Francisco Sáenz Valiente en Retiro, ahora acusó por un presunto homicidio culposo a la amiga de ella, Juliana Magalhaes Mourao, quien estuvo junto a ellos dos el 30 de marzo pasado.

La presentación de la acusación, mediante el abogado querellante, fue cuando el fiscal Santiago Vismara había citado a la joven a declarar nuevamente como testigo, algo que se suspendió a raíz de ese pedido.

Juliana, alias “Juli”, estuvo esa madrugada junto al empresario y la víctima, y por ello ahora el papá de la fallecida, que tiene otro abogado del de su madre, pidió que ella también se la impute por el mismo delito en el que está procesado Sáenz Valiente. 

Este hombre está en libertad con la imputación de homicidio culposo, luego que inicialmente estuviese detenido por homicidio agravado y posteriormente por abandono de persona seguido de muerte, calificaciones que tienen penas más duras.

Asimismo, también está procesado por suministro gratuito de estupefacientes, en concurso ideal con facilitación de un lugar para su consumo, a raíz de haber aportado la droga que se consumió esa madrugada. 

El sospechoso cuando pactó aquella noche la llegada de las cuatro chicas al departamento, entre ellas la modelo brasilera, quien arribó junto con otras dos mujeres y se encontró que en la propiedad de Libertad al 1500 ya estaba Saenz Valiente con otra joven. 

Luego se supo que dos se fueron durante la madrugada y quedó Emmily junto con “Juli” y el imputado. Estos dos aseguran que la víctima había consumido drogas, que le agarró una suerte de brote psicótico y se tiró del balcón desde el sexto piso. 

Sobre el suministro de estupefacientes, la cámara valoró que ni bien pactó la cita en su departamento, Sáenz Valiente chateó con una persona de quien se sospecha es una suerte de “dealer”, a quien le solicitó “dos blancos y un tus” en referencia a las sustancias. 

“El imputado facilitó gratuitamente tales estupefacientes, al ponerlos a disposición de sus invitadas y en su domicilio para que pudieran consumirlos. Es irrelevante cómo y quién organizó el encuentro; en lo que aquí interesa, fue él quien proporcionó las sustancias como también el lugar para su consumo”, acotó el tribunal al evaluar el caso.

Los jueces incluso valoraron los llamados que el empresario hizo a las 9.13 al 911, luego que a las 9 ella tuviese -según la defensa- el brote psicótico, donde tanto él como la modelo piden la presencia policial. Luego hay otro llamado un minuto más tarde, en el que solicitan nuevamente la ocurrencia de la Policía. 

Por ello entienden que “llevó adelante situaciones de auxilio” cuando la situación se puso “inmanejable”, pero sí que por las drogas que él consiguió, Emmily “tuvo una situación de descompensación psiquiátrica que determinó que cayera de una de las ventanas”.

“Creo una situación de peligro concreto”, concluyó por mayoría el tribunal y descartó la acusación de homicidio agravado de la querella. 

"Al haber puesto tales estupefacientes a disposición de sus invitadas, Sáenz Valiente creó un riesgo jurídicamente desaprobado, con incidencia directa en el resultado. Las partes coinciden en que Emmily atravesó un ´brote psiquiátrico' agudo a causa del consumo -alcohol, tusi y cocaína-. La propia defensa se encargó de presentar informes de expertos en toxicología, en los que se advierte sobre las posibles consecuencias de “la cocaína rosa”, señalaron.