Lo condenaron a prisión perpetua por matar y hacer desaparecer al mejor amigo

El mejor amigo de Salvador Altamura, el abogado desaparecido en julio de 2020, fue condenado a prisión perpetua como autor del crimen, a pesar de que nunca se halló el cuerpo.

El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 3 de Quilmes sentenció a Rubén Darío Dening (55) a la pena máxima como autor de un “homicidio criminis causa”, es decir, para ocultar otro delito y lograr la impunidad-, y de manera unánime  por el “robo agravado” ocurrido también en la casa de la víctima.

Los jueces Rubén Darío Hernández, Alejandro Oscar Portunato y Julián Busteros declararon culpable  este hombre, señalado como quien vio por última vez a Altamura con vida.

Según informaron fuentes judiciales, el único acusado pidió no estar presente en la sala judicial durante la lectura del veredicto, motivo por el que escuchó la condena desde la cárcel donde está alojado hace tres años.

Acerca de los alegatos, tanto la querella como la fiscalía coincidieron que el sospechoso debía recibir perpetua porque mató a Altamura con el objetivo de robarle dinero y que luego quiso ocultar el hecho con "la desaparición de su cuerpo”.

Eso se relaciona a su detención en Entre Ríos, donde personal de Gendarmería Nacional le encontró 386.662 pesos, 31.500 dólares y una campera perteneciente al abogado. 

Para la fiscalía, luego de asesinar a su amigo, el acusado tomó la motocicleta de la víctima y se dirigió hacia su departamento, ubicado en la calle 25 de Mayo 217, en pleno centro de Quilmes, donde "se apoderó ilegítimamente de una suma de dinero no especificada y un arma de fuego calibre 9 milímetros" propiedad del fallecido.

En la última audiencia del juicio, Dening tuvo la posibilidad de dar sus palabras finales. Sostuvo frente al tribunal que es "inocente en todos los cargos. 

Luego, cuando se retiró, los familiares de letrado le gritaron: "Asesino", "amigo traidor" y "decí dónde tiraste a Salvador".