Alarma por los accidentes de tránsito en Mendoza: más muertos que en 2022, aunque con una importante baja de los heridos
En lo que va del 2023, en Mendoza, se han registrado 8% más de fallecimientos en siniestros viales que en 2022. San Rafael, Guaymallén y San Martín son los departamentos con más accidentes.
En lo que va de este 2023, la cantidad de fallecidos en accidentes de tránsito en Mendoza ha superado en 8% lo registrado en 2022. De hecho, con un octubre a la mitad, ya suman 101 las víctimas, mientras que en 2022 -hasta el mismo mes- habían sido 93. Según los datos que maneja el Ministerio de Seguridad provincial, si bien hay un leve aumento en la cantidad de siniestros, hay una baja en lo que respecta a lesiones por accidentes.
Al respecto, en 2023, los accidentes con heridos que tiene registrados el área son 2.792. Así lo detalló a MDZ, el comisario inspector Javier López, subjefe de la Policía Vial, quien explicó también que hay otros hechos que llegan solo a los municipios o directamente no se detectan porque hay arreglos entre las partes, sin denuncia. “Son casi los mismos que en 2022 con un leve descenso: en siniestros con lesiones hay 3% de disminución y sin lesiones 9% menos”, dijo.
Sobre los fallecidos destacó que no parece un número relevante, pero sí indicó que "es preocupante porque cada persona no es un número, sino una vida".
“Muchos se quedarán con la estadística pero una persona que muere es preocupante y nos ocupa. Esto en particular porque en su mayoría son muertes evitables” remarcó López y resaltó que no estamos hablando de accidentes sino de siniestros viales que son mayormente en solitario, por distracciones o por exceso de velocidad.
Los fallecidos en solitario son 71 este año. De ese total, 34 fueron en auto y 37 fueron pasajeros de motos.
“En este tipo de hechos, también están las colisiones múltiples que se mantiene en el promedio de 50 por año. Esto se debe por gente que ante un hecho que ocurre en el carril de enfrente va filmando y colisionan al vehículo que va delante, son hechos que no pueden pasar; algo también común es que terminan de pasar el control policial y dos o tres kilómetros después apagan las luces y ya no tienen el cinturón, es un problema más que nada de tomar conciencia uno mismo”, señaló.
Otra de las causas más comunes en las rutas y calles de Mendoza, es la pérdida de control del vehículo o distracciones por el uso del celular, ir jugando o atendiendo al perro o los hijos.
Cabe recordar que los datos publicados de fallecidos y lesionados son la cifras que se manejaron hasta la noche de este sábado 14 de octubre.
Meses y departamentos críticos
Por otra parte, el subjefe de la Policía Vial resaltó que hay algunos meses particularmente críticos. Febrero, marzo y julio concentran la mayor cantidad de casos en 2023, el año pasado habían sido abril, junio y julio. López lo atribuyó a que puede asociarse a mayor circulación que se incrementa con la llegada de turistas. Efectivamente coinciden con situaciones como Vendimia, Pascua, vacaciones de invierno, feriados largos o temporada alta de verano.
Además, afirmó que Guaymallén y San Rafael son los departamentos con más casos, bastante por encima del resto. Este año Guaymallén lleva 15 fallecidos y San Rafael 13, lejos del que le sigue que es San Martín con 9.
“La población tiene que tomar conciencia de que muchas veces los hechos se dan por distracciones o exceso de confianza. Quien maneja debe ocuparse de la conducción y no perder nunca el control”, señaló el también comisario y enumeró que el aumento en la cantidad de fallecidos se debe también a otras condiciones como el aumento poblacional, también del parque automotor y la venta, cada vez mayor, de motos.
Asimismo, puso sobre la mesa el estado de las arterias y que estas no se han adaptado a la mayor afluencia de vehículos. De hecho, en épocas de mucho tránsito dijo que al colapsar ciertas arterias la gente empieza a tomar otras menos frecuentes y se amplían los lugares donde ocurren los siniestros. “En muchos lugares la infraestructura vial quedó obsoleta por la cantidad de vehículos, hay rutas y arterias principales obsoletas”, mencionó.
Por otro lado, para el comisario, la falta de señalización es otro elemento, tanto de la cartelería como en el uso, por ejemplo, del guiñe de giro por parte del conductor es otra causa frecuente de choques. “El arbolado público y su falta de mantenimiento es otra causante ya que tapa carteles o semáforos, pero el factor predominante es la concientización, si las personas cumplieran con la norma 9024 (la Ley de Tránsito) y respetara la velocidad, habría menos del 60 o 70 % de los fallecidos”, apuntó.
Además, dijo que en pocos casos hay intervención de inclemencias del tiempo cuando podría considerarse un accidente.
“Mientras la gente no entienda que maneja una máquina y debe tener control sobre los dispositivos del vehículo, seguirá ocurriendo. Si la población toma conciencia esto va a cambiar más allá de las multas porque si no hay que poner un policía en cada esquina y es imposible”, subrayó el efectivo.
De todas maneras, López hizo hincapié en que en términos generales Mendoza está mejor que otras provincias y mejorando. Es que se encuentra en el nivel más bajo de siniestralidad vial fatal, según la Dirección de Estadística Vial de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV).
Alcohol al volante: otro factor que preocupa
Otro tema a considerar, no solo por las autoridades y la población en general, es el consumo de alcohol al volante, aunque el subjefe de la Policía Vial no lo mencionó como uno de los factores más influyentes.
En Mendoza, de hecho, el 17% de los fallecidos en siniestros viales en 2023 había consumido alcohol. Se trató de 17 personas sobre un total de 101 muertes que hubo en estas circunstancias hasta mediados de octubre.
Desde el Ministerio de Seguridad les atribuyen “presunción de consumo” ya que explicaron que los siniestros viales presentan dificultad para corroborar fehacientemente la presencia de consumo de alcohol por ciertas particularidades del proceso de investigación. Pero señalan que se habla de presunción ya que las circunstancias llevan a ello, como la presencia de botellas o relatos de testigos. Es decir que el número incluso podría ser mayor cuando no hubo indicios.
En ese sentido, la proporción de mendocinos que conduce habiendo bebido alcohol previamente ha aumentado en los últimos años. Casi un cuarto de los consultados en la última Encuesta Nacional de Factores de Riesgo (ENFR) sostuvo que manejó un auto, moto o bicicleta habiendo bebido alcohol al menos una vez en los 30 días previos a la consulta.
Se trata de 23,3% en 2018, por encima del promedio de Cuyo y la provincia con este indicador más elevado en la región. Además, está muy por encima del promedio nacional de 15,2%. Había sido 20,9% en 2005, 18,3% en 2009, y 22,1% en 2013. Pero, por otra parte, hay que considerar que en Mendoza la prohibición total no existe por lo que, dentro de lo permitido, están avalados legalmente. Aquí se puede circular con hasta 0,5 gramos de alcohol en sangre como máximo.
Según la información brindada por el Ministerio de Seguridad local, los varones y los jóvenes son los más afectados, esto asociado en gran medida a que suelen tener más conductas de riesgo.
“De los fallecidos en 2023 en la provincia, 82% eran de ese género. En tanto, la mayor parte se produce los fines de semana: 82% ocurrieron esos días” detalló López.
Según la ANSV, las chances de siniestro con consumo de alcohol asciende a tres de cada 10 en jóvenes conductores entre 16 y 35 años.
Para finalizar, cabe recordar que, tras muchas idas y vueltas, la llamada Ley de Alcohol Cero fue finalmente sancionada el 13 de abril de este año en el Senado de la Nación. Esto significa que se prohibirá a nivel nacional conducir con alcohol en sangre, incluso con un mínimo, como rige en Mendoza, provincia donde no aplica.