Fuerte condena para un hombre que confesó que robó y mató en Guaymallén

En menos de 6 meses se cerró la investigación por un crimen cometido en un contexto de inseguridad en Mendoza. El hecho ocurrió en una casa de Guaymallén y tuvo como víctima a un hombre de 30 años, cuyo asesino este miércoles reconoció su autoría y fue condenado a 28 años de prisión.

Juan Vela murió en la noche del 20 de abril, en su casa de la zona de Puente de Hierro. Allí fue sorprendido en el interior de su vivienda, en calle Severo del Castillo al 9.000 y a solo unos 50 metros de la Subcomisaría Puebla. El hombre, que se dedicaba a la cosecha y vivía con su pareja y un hijo de 2 años, intentó evitar que un delincuente se robara su motocicleta y recibió un disparo en el tórax.

Su esposa, que en ese momento estaba en una propiedad contigua, se alertó ante la detonación y, cuando fue a su hogar, encontró a su marido tendido en el patio y sin reacción. Vecinos llevaron al herido al Microhospital de Puente de Hierro, también en Guaymallén, en donde los médicos constataron su deceso. 

La captura del sospechoso, Ricardo Alfredo Osorio (34), no demoró, ya que en la mañana siguiente estaba detenido. Había sido señalado por testigos que en la noche del crimen lo vieron circular en la Gilera 200 negra de Vela y lo identificaron. 

Este sujeto estaba imputado por homicidio criminis causa - matar para ocultar otro delito - y se encaminaba a la prisión perpetua, aunque un cambio de calificación terminó aliviando un poco su situación y lo sacó de la pena máxima. El fiscal Gustavo Pirrello y su defensa acordaron un juicio abreviado bajo la acusación de homicidio en ocasión de robo, por lo que el sindicado terminó confesando su responsabilidad en el hecho. 

Las partes pactaron una condena de 28 años de cárcel, en la que se incluyó la reincidencia por otros delitos. La sentencia finalmente fue dictada esta mañana por la jueza Sonia Yornet en el Polo Judicial.