Una familia fue condenada por dos crímenes con tintes mafiosos

Todo queda en familia asegura la frase y podría aplicarse a este caso criminal. Este viernes la Justicia condenó a tres miembros de una familia y a un amigo por dos homicidios ocurridos en la Triple Frontera en Mendoza. Creen que los hechos tienen relación con la guerra narco de la zona.

Carla Gimena Carrizo, su hermano Pablo, su pareja Diego Silva y su amigo Samuel Dalmau Sosa fueron sentados en el banquillo de los acusados por delitos gravísimos.

Los crímenes ocurrieron en noviembre del 2019 y enero del 2020 y tuvieron como epicentro la zona comprendida entre Godoy Cruz, Maipú y Luján. Ambos hechos tienen a dos sospechosos en la mira y, al parecer, una misma causa: la guerra narco y la disputa por el territorio.

El clan Carrizo fue acusado de ser los autores intelectuales -es decir mandar a matar- del crimen de Julián Domínguez (21) ocurrido en noviembre de 2019 en el barrio La Gloria. El joven fue asesinado de dos tiros, pero por error. Sucede que los Carrizo, de acuerdo a la investigación, manadaron a matar a Matías Olivera, conocido como Hueso, pero los sicarios se confundieron y asesinaron a un chico que nada tenía que ver.

El Hueso había sido denunciado por violencia de género por la hermana de Carla, pero además, estaba señalado por los investigadores como vendedor de droga en la zona. Esto último sería lo que desató la guerra con los Carrizo, quienes quisieron matarlo, pero fallaron.

En tanto, Silva y Dalmau están acusados de matar a Matías Guajardo el 19 de enero del 2020 en la puerta de su casa de Maipú. El crimen fue rápido. Los asesinos llegaron a la vivienda del joven y apenas apareció en la puerta le dieron 7 tiros. La muerte fue inmediata.

Un jurado popular fue el encargado de analizar los hechos durante el juicio y cerca de las 20 de este viernes llegaron a un veredicto. De manera unánime, el jurado declaró culpable a todos los sospechosos.

Carla Carrizo fue condenada a perpetua como instigadora de homicidio agravado por precio o promesa remuneratoria, al igual que Silva, quien también estaba acusado de homicidio agravado. Pablo Carrizo fue sentenciado a la pena máxima como coautor de homicidio agravado y Dalmau como partícipe secundario deberá esperar una nueva audicencia para conocer su condena.