Apareció muerto un hombre que dejó una terrible confesión

Un hombre fue encontrado muerto y de esta manera se resolvió uno de los casos policiales franceses más resonantes y preocupantes del país. El sujeto confesó ser el asesino y violador serial que fue intensamente buscado en la década de los 80 en el país europeo.

Le Grêlé -el seudónimo usado por el hombre que en español significa El Picado debido a que tenía su cara llana de cicatrices de acné- está sospechado de cinco delitos cometidos entre 1986 y 1994, entre ellos se encuentra la violación y posterior homicidio de una nena de 11 años y el estrangulamiento de una pareja.

El sospechoso era gendarme, lo que le posibilitó aislar su ADN de la base de datos y de esta manera permanecer entre las sombras durante 35 años.  

Su cuerpo fue hallado en un pueblo de Grau-du-Roi. cerca de Montpellier. Junto al cadáver los policías encontraron una nota de suicidio. En la misma, el hombre admitió haber cometido los crímenes, aunque no ahonda en los detalles de cómo los perpetró. Asimismo, en la nota afirma haber estado en mal estado de mental en el momento de los delitos y que desde 1997 no volvió a asesinar.

Tras el hallazgo, lograron realizar una prueba de ADN, cuyos resultados coinciden con las muestras encontradas en las escenas de crímenes. En total comprobaron que Le Grêlé cometió cuatro homicidios y seis violaciones entre 1984 y 1986. De todas maneras no descartan que habría cometido varios más.

El horroroso primer crimen

Una niña de 11 años fue la primera víctima de El Picado. La pequeña había salido de su casa con rumbo al colegio el 5 de mayo de 1986 y nunca regresó. Su cuerpo fue encontrado desnudo, estrangulado y apuñalado, tapado con una alfombra y escondido en un sótano. Las pericias comprobaron que había sido violada.