Ensalada de rúcula, peras y queso parmesano: receta de la combinación perfecta.

Esta receta de ensalada de rúcula, parmesano y peras es perfecta para quienes buscan una preparación rápida y saludable sin resignar sabor. Con ingredientes simples pero de gran personalidad, esta preparación transforma una ensalada en un plato digno de una mesa especial, ideal como entrada o acompañamiento.

La ensalada de rúcula, parmesano y peras es una de esas combinaciones clásicas que no falla. La rúcula aporta su característico sabor levemente picante y fresco, que contrasta a la perfección con la dulzura y textura suave de las peras. El queso parmesano, con su sabor intenso y salado, redondea el conjunto con un toque gourmet. Es muy sencilla y no requiere cocción, por lo que resulta ideal para preparar en minutos y servir en cualquier momento. Además, admite muchas variantes: se puede agregar nueces tostadas, usar peras grilladas o cambiar el aderezo por una vinagreta con miel o mostaza. Perfecta para servir como entrada elegante, guarnición de carnes o plato principal liviano, esta ensalada es un ejemplo de cómo lo simple puede ser realmente sofisticado.

Prueba esta ensalada de rúcula, parmesano y peras..jpg

Aunque solo lleva minutos prepararla, es una de las recetas más preparadas y servidas en restaurantes de alta cocina.

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Ingredientes

100 g de rúcula fresca, 2 peras maduras pero firmes, 50 g de queso parmesano en lascas o escamas, 1 cucharada de jugo de limón, 2 cucharadas de aceite de oliva extra virgen, 1 cucharadita de vinagre balsámico (opcional), sal y pimienta negra a gusto, (opcional) 2 cucharadas de nueces, almendras o semillas tostadas.

Paso a paso para hacer ensalada de rúcula, parmesano y peras

1. Lava muy bien la rúcula con agua fría, eliminando posibles restos de tierra. Escúrrela con un colador o centrifugadora de verduras y sécala con papel de cocina. Si los tallos son muy largos o duros, puedes retirarlos. Reserva las hojas limpias en un bol grande.
2. Lava las peras, quítales el corazón y córtalas en gajos finos o en cubos, según prefieras. Si la piel es fina, puedes dejarla; si es muy gruesa, puedes pelarlas. Para evitar que se oxiden y se pongan oscuras, rocíalas con una cucharada de jugo de limón inmediatamente después de cortarlas.
3. Con la ayuda de un pelapapas o cuchillo afilado, corta el queso parmesano en láminas finas o escamas. También puedes usar parmesano rallado grueso, pero las lascas dan mejor textura y presentación.
4. En una ensaladera grande o directamente sobre los platos, coloca primero la rúcula como base. Distribuye los gajos de pera por encima de forma decorativa. Luego añade las lascas de queso parmesano y, si decidiste usarlas, esparce nueces o semillas tostadas.
5. En un pequeño recipiente, mezcla el aceite de oliva con una pizca de sal, pimienta negra recién molida y, si te gusta, una cucharadita de vinagre balsámico. Mezcla bien hasta emulsionar. También podés añadir unas gotas de miel para un toque dulce, o mostaza para más carácter.
6. Rocía la ensalada con el aderezo justo antes de servir para que las hojas no se marchiten. Mezcla suavemente para que los ingredientes se impregnen bien y serví de inmediato.

Un gratificante sabor tiene esta ensalada..jpg

La combinación de rúcula amarga, pera dulce y parmesano salado crea un equilibrio de sabores en esta receta gourmet.

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De la cocina a tu mesa

Si querés darle un toque más cálido y gourmet, podés grillar las peras en una plancha caliente con unas gotas de aceite durante 1 o 2 minutos por lado. Tambien puedes sustituir el parmesano por queso azul, brie o grana padano. Las nueces combinan muy bien, pero también funcionan bien almendras tostadas, pistachos o avellanas.

Con esta receta de ensalada de rúcula, parmesano y peras vas a lograr un plato fresco, sabroso y equilibrado, que combina texturas, sabores y elegancia en pocos minutos. Ideal para comer bien sin complicaciones. ¡Y a disfrutar!