Receta de tarta de peras jugosa y rápida: sigue el paso a paso

La tarta de peras es ideal para quienes buscan un postre casero, delicado y lleno de sabor. Combina una base crocante de masa con un relleno cremoso y peras frescas, creando un equilibrio perfecto entre dulzura, suavidad y textura. Es fácil de hacer y siempre sorprende.
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La tarta de peras es una opción elegante para cualquier ocasión: desde un té por la tarde hasta una cena especial. Su origen se asocia a la repostería francesa, donde las frutas frescas son protagonistas en numerosas preparaciones. La versión que aquí presentamos combina tradición con un toque hogareño. Las peras, al hornearse, se vuelven tiernas y liberan sus jugos, impregnando la crema con su aroma natural.
Además, es versátil: puedes utilizar diferentes variedades de pera según la temporada, como Williams, Abate Fetel o Conferencia. Incluso puedes agregar un toque de licor, ralladura de limón o una pizca de canela para personalizar el sabor. La masa puede ser casera o comprada, aunque te enseñaremos a prepararla desde cero para un resultado aún más sabroso. El secreto está en trabajar con ingredientes frescos y tratar las peras con cuidado para que mantengan su forma y textura. ¡Vamos a la receta!
Ingredientes
Harina 300 g, manteca fría 150 g, azúcar glass 50 g, huevo 1 unidad, esencia de vainilla 1 cucharadita, sal 1 pizca, peras maduras 4 unidades, azúcar común 100 g, crema de leche (nata) 200 ml, huevo 1 unidad (para el relleno), almidón de maíz 1 cucharada, jugo de medio limón, mermelada de durazno 2 cucharadas, agua 1 cucharada.
Procedimiento
- Coloca la harina, el azúcar glass y la pizca de sal en un bol grande. Agrega la manteca fría cortada en cubos pequeños. Con las yemas de los dedos o un mezclador de masa, integra la manteca con los secos hasta obtener una textura arenosa.
- Añade el huevo y la esencia de vainilla. Mezcla con una cuchara o con la mano hasta formar una masa suave pero firme. Si está muy seca, puedes agregar una cucharadita de agua fría. No amases en exceso.
- Forma un disco con la masa, envuélvela en film transparente y déjala reposar en la heladera durante 30 minutos.
- Mientras tanto, prepara las peras. Pélalas, córtalas por la mitad y retira el centro con las semillas. Luego córtalas en láminas finas, cuidando que no se desarmen. Rocíalas con jugo de limón para evitar que se oxiden.
- Precalienta el horno a 180?°C. Retira la masa de la heladera y estírala sobre una superficie ligeramente enharinada hasta obtener un grosor de 3 a 4 mm. Forra con ella un molde para tarta (preferentemente desmontable) de unos 24 cm de diámetro. Pincha la base con un tenedor.
- Lleva la masa al horno por 10 minutos para hacer una cocción en blanco. Puedes cubrirla con papel manteca y porotos secos para evitar que se infle.
- Mientras se hornea, mezcla en un bol el huevo, el azúcar común, la crema de leche y el almidón de maíz. Bate ligeramente hasta obtener una mezcla homogénea.
- Retira la tarta del horno, quita el peso y el papel, y vierte la preparación líquida sobre la base precocida.
- Acomoda las peras laminadas en forma de abanico o en círculos concéntricos, hundiéndolas ligeramente en la crema.
- Hornea hasta que se dore sutilmente la parte de arriba.
Retira del horno y deja enfríar, la puedes servir tambien tibia acompañada con crema batida o una bocha de helado de vainilla.
La tarta de peras es un postre que tiene un sabor irresistible, combinando la jugasidad de la fruta y una masa suave, crujiente y única. La puedes servir como una merienda deliciosa acompañada de la infusión que más te guste o como postre para despúes de almorzar o cenar. ¡Y a disfrutar!