Se verá impecable: trucos para limpiar la chimenea a fondo

Tener una chimenea es uno de los regalos más lindos para el hogar. Poder encenderla en los días de frío y sentarse a un lado para llevar calor al cuerpo, es de las sensaciones más acogedoras y satisfactorias que hay en una casa. 

Por más que la temporada de invierno haya acabado, limpiar la chimenea es crucial para mantenerla en buen estado y que su funcionamiento no se vea perjudicado. Además, Hogar Manía señala que, si en temporada fría se usa la chimenea a diario, esta se debe limpiar al menos una vez por semana. Esto debido a que el hollín da lugar a la creosota, que es una sustancia altamente combustible y que puede impedir el correcto funcionamiento de la chimenea.

Por todo esto, traemos los trucos ideales para limpiar y quitar el hollín de la chimenea de forma fácil y rápida. 

Trucos para limpiar la chimenea

Lo más importante para comenzar con la limpieza de la chimenea es que esta debe estar fría. Luego, solo debes seguir estos pasos:

1. En primer lugar, coloca alrededor de la chimenea una tela gruesa para evitar ensuciar la zona más próxima a la misma. Además, cubre tu cuerpo con ropa vieja.

2. Luego, retira la leña a medio quemar, y barre todas las cenizas. En el segundo caso, con el cabezal de una escoba o cepillo de mano, retira todas las cenizas con un recogedor metálico o badil como se aprecia en la imagen.

3. Ahora sí, la tarea más importante: Deshollina la chimenea. En este paso es crucial desprender del tubo extractor y de las paredes todo el hollín que va quedando tras su uso. Para esto vas a necesitar un cepillo de cerdas metálicas con el que limpiarás a fondo el tubo extractor para desprender el hollín acumulado. 

4. Tras deshollinar el tubo extractor de la chimenea, debes limpiar a fondo las paredes, el techo y la base de la misma.

5. Para que la limpieza de las cenizas sea completa, utiliza una aspiradora para retirar las cenizas y el hollín de todos los rincones y juntas.

6. Por último, limpia a fondo la chimenea con vinagre diluido en agua o con bicarbonato y tu lavavajillas habitual haciendo con ello una pasta que podrás aplicar. Según el grado de suciedad deja reposar el producto aplicado de 15 a 30 minutos y retíralo después con un paño humedecido en agua caliente.