Bondad sin límites: así fue cómo Mel Gibson ayudó a Britney Spears a salir adelante en su peor momento

El ex mejor amigo de Britney Spears, Sean Phillip, en una entrevista que tuvo con “The Sun” comentó lo mal que estaba la estrella del pop en 2008 cuando colapsó definitivamente, se rapó la cabeza y golpeó a periodistas. También comentó que había un gran grupo de personas con sus teléfonos retratando el momento.

Phillip, ex amigo y ex entrenador de Spears recordó que una gran cantidad de personas se acercaron a Britney para ofrecerle apoyo. Una de esas personas fue Mel Gibson que le dijo: “Que el cristianismo la salvaría y que se volvería a Dios, todo fue bastante surrealista".

Otra fuente cercana a Britney expresó: "Mel fue una de las pocas personas que ayudaron a Britney a salir adelante cuando ella estaba en lo más bajo y ella cree que él es un hombre estupendo y cariñoso".

El ex entrenador también comentó que en los meses previos a su colapso, Spears estaba agotada física y mentalmente y su equipo la sostuvo con drogas. Cuando la estrella colapsó en una fiesta de fin de año en Las Vegas, el que por aquel entonces fuera su equipo trató de disimular la situación.

Es por ello que Phillip comenta: “Cuando se desmayó, la gerencia trató de darle una presunta anfetamina para que volviera a estar consciente y trabajando". Sin lugar a dudas Britney no estaba en condiciones psicológicas ni físicas de hacerlo.

Sean siguió su relato diciendo: "La realidad es que estaba agotada. La estaban explotando hasta los huesos y no estaba en condiciones de seguir trabajando. La medicación que estaba tomando no la estaba ayudando en absoluto. Se estaba volviendo paranoica como nunca antes la había visto. Cuando se desmayó en el club en aquella... tuve que sacarla, cargarla sobre mi hombro con una chaqueta de traje negra sobre ella y detener a la gente que intentaba tomar fotografías con sus teléfonos ".

Phillip recuerda que la misma noche del hecho la cosa siguió, y expresó: “Esa noche, la gerencia se acercó y estaba tratando de darle algo, en forma de píldora, y dije, 'No, no está sucediendo'. Ella estaba simplemente abrumada. Les rogué que la dejaran descansar ".