Mejora la organización en tus alacenas con estos simples trucos

Si eres de esas personas que temen abrir las puertas de sus alacenas porque se puede aproximar una avalancha de ollas, fuentes y trastos, es hora que hagas algo con este desorden. No hace falta comprar más muebles y amontonarlos en tu cocina, solo debes mejorar la organización y maximizar el espacio.

Puede desocupar completamente estos espacios de vez en cuando sea de gran ayuda, allí te darás cuentas que existen cosas que simplemente ya no usas o que están estropeadas, pero te da pena desecharlas. También deberías usar esta misma táctica donde guardas tus alimentos ya que es probable que encuentres algo que caducó y ni siquiera lo percibiste. 

Airear tus alacenas y limpiarlas es una actividad que deberías incluir en tu rutina debido a que, por ejemplo, dentro de los envases de harinas puede desarrollarse gorgojos o picudos que infectarán toda tu mercadería. Para mantenerlos alejados el mejor remedio es poner algunos algodones con vinagre.

Cuando el espacio se encuentre completamente limpio ahora es hora de organizar los elementos. Puedes establecer distintas categorías según tus hábitos de consumo y elegir los lugares más próximos para ubicar aquellas cosas que usas con mayor frecuencia. Ahí ya tienen un parámetro a seguir. 

Los frascos o paquetes más pequeños son mejor acomodarlos juntos en una canasta que te ayude a encontrarlos con facilidad.

Usar separadores según categorías es una gran opción. De esta forma puedes disponer de una caja dentro de tu alacena donde pongas todo lo que utilizas para el desayuno, como el té, café, yerba o azúcar. Así será muy sencillo y cómodo.

Las etiquetas son grandes aliados. De esta forma podrás identificar los alimentos con un simple vistazo. 

Si tu punto débil son las ollas o trastos debes tener un corazón fuerte y definir cuáles realmente son útiles, la misma regla se aplica con los cubiertos. Estos utensilios son los que ocupan mayor espacio por eso es importante que establezcas si realmente necesitas tener todas disponibles o si solos las utilizas en ocasiones especiales. 

Separar los recipientes de sus tapas puede ser aconsejables. Utiliza una caja con divisiones para poder ubicar las tapas paradas y así poder montar las ollas según su tamaño.