Israel bombardeó el sur de Gaza tras presunto ataque de milicianos a sus tropas
La Fuerza Aérea israelí bombardeó Rafah tras un ataque de milicianos contra tropas en la zona, en medio de la fragilidad del alto el fuego vigente.

El ataque de Israel se dio luego de un enfrentamiento entre Hamás y fuerzas israelíes en Rafah.
La ciudad de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, vuelve a ser escenario de bombardeos. La Fuerza Aérea de Israel realizó ataques aéreos luego de que presuntos milicianos atacaran a soldados apostados en la zona. Fuentes locales confirmaron el suceso, aunque el Ejército israelí aún no ha emitido declaraciones oficiales.
Las detonaciones se registraron en el sector oriental de Rafah, donde testigos informaron la caída de varios misiles y la presencia de humo visible desde distintos puntos de la ciudad. Helicópteros israelíes habrían aterrizado para evacuar a soldados posiblemente heridos. Hasta el momento no hay confirmación sobre víctimas.
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Fuentes locales señalaron que el ataque ocurrió pocas horas después de un enfrentamiento armado entre milicianos palestinos. Un portavoz del brazo militar de Hamás afirmó que su grupo había lanzado una operación para eliminar a Yasser Abu Shabab, líder de la milicia rival conocida como las “Fuerzas Populares”, cuando soldados israelíes intervinieron en apoyo a Shabab, generando un fuego cruzado que habría destruido una excavadora militar israelí.
La justificación de Israel al ataque
El Ejército israelí confirmó haber lanzado los bombardeos sobre Rafah en reacción a lo que calificó como “un ataque directo contra sus tropas”. Según el comunicado oficial difundido este domingo, las fuerzas israelíes respondieron al “lanzamiento de un misil antitanque y disparos contra unidades” desplegadas en la zona sur de Gaza, actualmente bajo control militar de Israel. La operación, de acuerdo con el texto castrense, buscó “eliminar la amenaza y desmantelar trampillas de túneles y estructuras utilizadas para actividades terroristas”.
En su explicación, las autoridades israelíes defendieron la ofensiva como una acción “defensiva y proporcional” ante lo que describieron como una violación del alto el fuego por parte de grupos armados gazatíes. “Estos actos terroristas constituyen una flagrante violación del acuerdo de alto el fuego y el Ejército responderá con firmeza”, agregó el comunicado. Fuentes militares subrayaron que los ataques se centraron exclusivamente en posiciones de Hamás y en instalaciones consideradas como infraestructuras militares.
Represión interna tras el alto el fuego
Desde la entrada en vigor del alto el fuego, Hamás ha intensificado su control sobre el territorio. Diversas fuentes locales informaron que sus fuerzas han iniciado una campaña contra clanes y milicias acusadas de colaborar con Israel durante los últimos años de ofensiva militar. En varios casos, se habrían producido ejecuciones públicas de supuestos colaboradores, videos que se viralizaron rápidamente en redes sociales.
La situación en Rafah refleja el deterioro de la tregua y la inestabilidad política dentro de Gaza. La comunidad internacional observa con preocupación el aumento de los enfrentamientos y la posibilidad de un colapso del frágil cese al fuego, mientras la población civil permanece atrapada entre las hostilidades y la escasez de suministros básicos.