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Del análisis a la militancia: cómo los especialistas arruinaron su cobertura de inteligencia artificial

Un texto de Wired sobre el modelo Grok desató críticas por su sesgo político y falta de análisis técnico sobre desafíos reales de la inteligencia artificial.

La inteligencia artificial Grok sigue en el foco de críticas del periodismo especializado, apuntado también por sus análisis poco técnicos y basados en la ideología política.

La inteligencia artificial Grok sigue en el foco de críticas del periodismo especializado, apuntado también por sus análisis poco técnicos y basados en la ideología política.

La revista Wired, históricamente reconocida por su cobertura de tecnología con mirada crítica y sofisticada, publicó esta semana un artículo sobre el modelo de inteligencia artificial (IA) Grok, desarrollado por xAI, la empresa de Elon Musk. Lo que podría haber sido un análisis técnico serio sobre los límites de la IA, los riesgos en su implementación estatal o los desafíos regulatorios, fue un panfleto de baja calidad intelectual combinando obsesiones ideológicas, propaganda política y mala fe informativa.

El artículo acusa a Grok de generar respuestas antisemitas, incluido un elogio a Hitler, y utilizar este hecho grave como excusa para el desarrollo de una narrativa desproporcionada, centrada en atacar a Musk, a Trump, al “antiwokismo” y a todo lo que no encaje con su línea editorial cada vez más militante.

No hay un análisis técnico real del incidente. Nadie explica cómo fue que el modelo llegó a decir lo que dijo, en qué contexto, con qué tipo de preguntas, si fueron ataques adversariales, errores de afinado o problemas del sistema de moderación. Tampoco se discute que todos los modelos de lenguaje, incluso los más prestigiosos, generan respuestas aberrantes si no están correctamente configurados o si se los utiliza mal. Lo hizo Wired es señalar que Grok “dijo cosas nazis” y luego construyó sobre eso una tesis política, sin examinar los límites de los grandes modelos de lenguaje y el desafío técnico que suponen. El artículo conecta a Elon Musk con Donald Trump, insinúa una alianza peligrosa con el aparato estatal, y siembra miedo sobre una supuesta militarización de la IA. Todo esto con argumentos débiles y sin datos verificables.

Además, la publicación ignora cómo funcionan las contrataciones públicas de tecnología en Estados Unidos. Menciona que Grok sería incluido en una lista de software disponible para dependencias del gobierno federal, lo cual no significa que todas las agencias lo usen ni que haya un contrato masivo detrás. Tampoco aclara que la lista en cuestión, el “GSA Multiple Award Schedule”, es solo un mecanismo burocrático para facilitar compras, no un respaldo ideológico ni una validación técnica definitiva. Y lo más absurdo: mientras critica que Grok pueda ser usado por el Estado, omite que OpenAI, Google y Anthropic ya firmaron acuerdos para ofrecer sus modelos al gobierno, incluso en condiciones promocionales, por un dólar simbólico ¿Dónde está el escándalo ahí?

La ideología "woke" en la cobertura tecnológica

Pero el punto más preocupante no es el ataque a Musk. El verdadero problema es cómo la ideología woke, que ya contaminó la política, la universidad y los medios, ahora se cuela en el corazón de la cobertura tecnológica. Lo que antes era un ámbito de discusión racional, de preguntas difíciles sobre el futuro, la ética, la eficiencia, la privacidad y la innovación, hoy se reduce a un juego tribal: buenos contra malos, progres contra reaccionarios. No importa si el modelo funciona, importa si está alineado con los valores correctos. No importa si puede ser útil para millones de personas, importa si repite las frases aprobadas por el comité moral de turno.

Entramos en una etapa donde la tecnología ya no se evalúa por su capacidad o su impacto, sino por su ideología. Y si eso no se detiene, los próximos censurados no van a ser los modelos defectuosos, sino los que piensen distinto.

Las cosas como son.

*Mookie Tenembaum aborda temas de tecnología como este todas las semanas junto a Claudio Zuchovicki en su podcast La Inteligencia Artificial, Perspectivas Financieras, disponible en Spotify, Apple, YouTube y todas las plataformas.