Histórico descubrimiento en Gran Bretaña: más antiguo que Stonehenge

Un equipo de arqueólogos determinó que el recinto funerario prehistórico de Flagstones, ubicado en Dorset, es el ejemplo más antiguo de arquitectura monumental en Gran Bretaña, con una antigüedad estimada en 3.200 a.C. Este descubrimiento permite conocer los orígenes de la sociedad neolítica en la región.
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Mediante análisis de radiocarbono aplicados a restos humanos, astas de ciervo rojo y carbón vegetal descubiertos en el sitio, los investigadores establecieron que Flagstones fue construido en el 3.200 a.C., lo que supone una antigüedad de dos siglos más de lo que se creía anteriormente. Este dato sugiere que el sitio pudo haber servido como modelo para posteriores monumentos icónicos, entre ellos Stonehenge.
Los resultados de esta investigación, llevada a cabo por especialistas de la Universidad de Exeter y Historic England, fueron publicados en la revista Antiquity.
La doctora Susan Greaney, experta en monumentos neolíticos y de la Edad del Bronce en el Departamento de Arqueología e Historia de la Universidad de Exeter, explicó que Flagstones es un monumento singular. Según detalló, se trata de un recinto circular delimitado por un foso, asociado a prácticas funerarias, con características que lo asemejan tanto a los recintos amurallados con accesos intermitentes de épocas más tempranas como a los denominados henges, construidos posteriormente. Sin embargo, hasta ahora no se había determinado con precisión a cuál de estas categorías correspondía. La nueva cronología indica que su construcción tuvo lugar antes de lo que se suponía.
El yacimiento de Flagstones fue descubierto en la década de 1980 durante las obras de la circunvalación de Dorchester. En ese entonces, las excavaciones revelaron la existencia de un foso circular de 100 metros de diámetro, compuesto por zanjas interconectadas y, probablemente, acompañado de un terraplén. En la actualidad, la mitad del sitio se encuentra bajo la carretera, mientras que la otra parte está bajo Max Gate, la que fuera residencia de Thomas Hardy y que hoy es administrada por el National Trust.
Flagstones ha sido reconocido como un monumento protegido, y los objetos descubiertos en el lugar, junto con los registros de la excavación, forman parte de la colección del Dorset Museum.
Las excavaciones identificaron al menos cuatro entierros dentro de las zanjas del recinto, correspondientes a un adulto incinerado y tres niños inhumados sin cremación, además de otros tres restos parciales de adultos cremados en distintas ubicaciones. La similitud del sitio con la fase inicial de Stonehenge, datada en torno a 2.900 a.C., llevó a los investigadores a suponer que Flagstones fue construido en la misma época.
Un nuevo programa de datación científica permitió establecer que la actividad neolítica en la zona comenzó hacia 3.650 a.C., con la excavación de fosas. Luego, tras varios siglos de inactividad, se construyó el recinto circular alrededor de 3.200 a.C., seguido poco después por la colocación de enterramientos. Posteriormente, aproximadamente 1.000 años después, se llevó a cabo el entierro de un joven adulto bajo una gran piedra sarsen en el centro del monumento.
La doctora Greaney destacó que la cronología revisada de Flagstones es fundamental para comprender la evolución de los monumentos ceremoniales y funerarios en Gran Bretaña. Explicó que Stonehenge, considerado un monumento vinculado a Flagstones, presenta una primera fase muy similar, aunque su construcción se sitúa en torno a 2.900 a.C.
Asimismo, planteó interrogantes sobre la relación entre ambos sitios, cuestionando si Flagstones pudo haber servido de inspiración para Stonehenge o si los nuevos datos sugieren la necesidad de revisar la cronología de este último.
Además, Flagstones guarda relación con otros sitios relevantes, como el ‘Henge’ A de Llandygái, en Gwynedd, Gales, e incluso con enclaves en Irlanda, lo que se ha determinado a partir de objetos encontrados y las prácticas funerarias identificadas. Estos hallazgos refuerzan la idea de que las comunidades neolíticas de Gran Bretaña mantenían vínculos con otras regiones en este periodo.