Las cosas como son

Cómo seguirá el régimen de Vladimir Putin: una mirada comparativa con sus aliados

El Kremlin prepara la sucesión para la próxima generación de poderosos en la Federación Rusa.

Mookie Tenenbaum lunes, 5 de agosto de 2024 · 13:42 hs
Cómo seguirá el régimen de Vladimir Putin: una mirada comparativa con sus aliados
Vladimir Putin asumió en 1999 como presidente de Gobierno de Rusia Foto: NA

En la política autocrática, la continuidad del poder es fundamental para la estabilidad del régimen. A diferencia de China, donde el Partido Comunista garantiza la sucesión, Rusia se enfrenta al desafío de construir una continuidad que no depende de una estructura partidaria establecida. Vladimir Putin, consciente de esta necesidad, inició un proceso para asegurar que su régimen perdure más allá de su liderazgo personal, nombrando a familiares y amigos cercanos en posiciones clave del gobierno. Esta estrategia busca evitar que la incertidumbre sobre la sucesión debilite su control sobre el país.

Las autocracias más distintivas implementan distintos métodos para sumar certidumbres:

  • China: el Partido Comunista asegura la sucesión del poder a través de una estructura partidaria bien establecida. El Comité Permanente del Politburó, el máximo órgano de decisión, incluye a líderes seleccionados cuidadosamente para garantizar la estabilidad y continuidad del régimen. Después de Xi Jinping, es probable que otro miembro del Partido, ya preparado y aprobado, asuma el liderazgo, manteniendo así la continuidad sin grandes sobresaltos.
  • Corea del Norte: la sucesión del poder se maneja dentro de la familia Kim. Kim Jong-un ascendió tras la muerte de su padre, Kim Jong-il, y este llegó a su vez cuando falleció su respectivo padre, Kim Il-sung. Esta dinastía aseguró la continuidad del régimen mediante la transferencia del poder dentro de la familia, lo que minimiza la incertidumbre y los posibles conflictos internos.
  • Irán: aunque posee una estructura más compleja, también asegura la continuidad del régimen a través del Consejo de Guardianes y el Líder Supremo. El Líder Supremo, actualmente Ali Khamenei, tiene la autoridad de designar a su sucesor, quien es usualmente alguien dentro del círculo de altos clérigos y políticos leales al régimen, garantizando así la permanencia del sistema teocrático.

Volviendo a Rusia, emerge una manera de garantizar esta continuidad. Vladimir Putin y la Dinastía del Kremlin: Putin nombró a Anna Tsivileva, su prima lejana, como viceministra de defensa. Tsivileva tiene una experiencia limitada en defensa, siendo anteriormente psiquiatra y empresaria en el sector del carbón.

Ella es parte de un grupo de familiares y amigos cercanos a Putin que recibieron altos cargos tras su reelección en marzo, lo que sugiere un movimiento estratégico para consolidar una estructura de poder hereditaria. El objetivo de esta continuidad es preparar a la próxima generación, tras la desaparición de Putin como actor central.

Garantizar la Longevidad del Régimen: la designación de estos "príncipes del Kremlin" sugiere que Putin está preparando una sucesión para asegurar la longevidad de su régimen. Esta estrategia busca transferir poder a una nueva generación de líderes fieles, evitando así la fragmentación del poder en un futuro sin Putin.

Entre tanto, otras designaciones ofrecen trazos sobre cómo se verá el esquema político futuro. Cargos estratégicos:

  • Andrei Belousov, un funcionario económico, fue nombrado jefe del ministerio de defensa el mes pasado.
  • Leonid Gornin, un respetado viceministro de finanzas, será el principal adjunto de Belousov.
  • Dmitry Patrushev, fue promovido a viceprimer ministro. Este es hijo de Nikolai Patrushev, un aliado del presidente ruso desde su tiempo en San Petersburgo.
  • Boris Kovalchuk, hijo del multimillonario Yuri Kovalchuk, ahora dirige la cámara de auditoría de Rusia.

Otros Nombramientos Destacados:

  • Pavel Fradkov, hijo de un ex primer ministro, fue nombrado viceministro de defensa.
  • Roman Rotenberg, vinculado a la federación de hockey sobre hielo y a Gazprombank, también mantiene cargos destacados.

Los motivos de estos nombramientos agregan dimensiones al análisis. Pagando favores y asegurando lealtades:

  • Un ex funcionario ruso afirmó que Putin está pagando favores a quienes lo ayudaron a alcanzar el poder.
  • Ejemplos específicos incluyen a Nikolai Patrushev y Yuri Kovalchuk, ambos con roles cruciales en la historia de Putin.
  • Estos nombramientos reflejan un deseo de asegurar posiciones a largo plazo dentro de la élite rusa, preparándolos para cualquier cambio futuro en el liderazgo.

Sin embargo, esto deja una serie de desafíos para el futuro del gobierno ruso ante cuestionamientos profesionales y el nepotismo.

-La preocupación es que estos individuos pueden no tener las competencias profesionales necesarias, lo que podría crear un desequilibrio en la administración pública.

-Pavel Luzin y Alexandra Prokopenko destacan la dependencia de Belousov en el presidente debido a su falta de aliados previos en el ministerio de defensa.

Y ante este escenario, la comparación con el resto de las autocracias revela algunas aristas de interés.

China vs. Rusia: mientras que China cuenta con un Partido Comunista robusto que facilita la sucesión, Rusia debe crear una estructura de poder familiar y de lealtades personales para asegurar la continuidad. En China, la sucesión es un proceso institucionalizado, lo que reduce la incertidumbre y el riesgo de conflicto. En Rusia, la dependencia de figuras familiares y cercanas a Putin generará tensiones si estas no logran mantener el control.

Corea del Norte vs. Rusia: Corea del Norte utiliza una dinastía familiar estricta para asegurar la continuidad, similar a la estrategia de Putin de promover a sus "príncipes del Kremlin". Sin embargo, la diferencia radica en la historia y la aceptación cultural de la dinastía Kim, que tiene un legado de liderazgo que se remonta a varias generaciones. En Rusia, la reciente creación de esta estructura de poder puede no ser tan estable o aceptada.

Irán vs. Rusia: Irán utiliza una combinación de autoridad religiosa y política para asegurar la sucesión. La estructura teocrática y el poder del Líder Supremo proporcionan una continuidad estable que Putin busca replicar mediante lealtades personales y familiares. Sin embargo, la legitimidad en Irán está profundamente enraizada en la religión y la política, mientras que en Rusia, la legitimidad depende más de la figura de Putin y su capacidad para mantener el control.

En resumen, la estrategia de Vladimir Putin de nombrar a familiares y amigos cercanos en altos cargos del gobierno busca asegurar la continuidad de su régimen más allá de su liderazgo personal. Este enfoque, aunque criticado por su nepotismo, es una táctica para mantener el control y la estabilidad en una Rusia sin un partido comunista que garantice la sucesión. Comparado con otros regímenes autocráticos como China, Corea del Norte e Irán, Rusia enfrenta el desafío de construir una continuidad en un entorno donde la estabilidad del poder depende en gran medida de la figura de Putin. Esta estrategia podría funcionar a corto plazo, pero su efectividad a largo plazo, en realidad, incrementa la impredictibilidad.

Las cosas como son.

*Mookie Tenembaum aborda temas internacionales como este todas las semanas junto a Horacio Cabak en su podcast El Observador Internacional, disponible en Spotify, Apple, YouTube y todas las plataformas.

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