Las cosas como son

La corrupción en el ejército chino: un obstáculo para el sueño militar de Xi Jinping

China sueña con su consolidación como la máxima potencia militar del mundo, pero los problemas internos de corrupción atentan contra eso.

Mookie Tenenbaum viernes, 13 de diciembre de 2024 · 22:44 hs
La corrupción en el ejército chino: un obstáculo para el sueño militar de Xi Jinping
El líder chino no encuentra una solución final para la corrupción en el ejército Foto: EFE

China enfrenta una serie de escándalos de corrupción en su cúpula militar que pusieron en jaque los planes de modernización del Ejército Popular de Liberación (EPL). La reciente investigación contra Dong Jun, actual Ministro de Defensa, se suma a las acusaciones previas contra sus antecesores Wei Fenghe y Li Shangfu, generando dudas sobre la eficacia de la campaña anti-corrupción liderada por el presidente Xi Jinping.

Desde su llegada al poder en 2012, Xi Jinping se propuso transformar al EPL en una fuerza militar capaz de competir con potencias como Estados Unidos. Para lograrlo, lanzó una campaña masiva contra la corrupción, no solo dentro del Partido Comunista, sino también en el ejército. Su objetivo declarado: consolidar un ejército leal, eficiente y libre de las prácticas corruptas que habían socavado su funcionamiento durante décadas.

Los resultados han sido notables, pero también polémicos. Más de nueve generales de alto rango fueron removidos de sus cargos, junto con ejecutivos de empresas estatales de defensa. Sin embargo, estas acciones han dejado al descubierto un problema más profundo: la corrupción parece estar enraizada en las estructuras del complejo militar-industrial chino.

La destitución de ministros como Wei Fenghe y Li Shangfu evidencia la gravedad de la situación. Wei, exlíder de la poderosa Fuerza de Cohetes del EPL, fue acusado de abusar de su posición para obtener beneficios personales. Li, por su parte, solo ocupó el cargo de Ministro de Defensa durante siete meses antes de ser destituido por supuestos sobornos relacionados con el desarrollo de armas avanzadas. Ahora, Dong Jun, quien asumió el cargo en diciembre de 2023, enfrenta un destino similar, lo que plantea preguntas sobre la capacidad del sistema para autorregularse.

Más preocupante aún son los recientes escándalos que involucran a la Fuerza de Cohetes, encargada del arsenal nuclear de China. Informes revelaron fallas críticas, como misiles llenados con agua en lugar de combustible y silos de misiles construidos con materiales defectuosos. Estos problemas no solo exponen la vulnerabilidad del ejército chino, sino que también generan dudas sobre su preparación en un contexto de tensiones geopolíticas crecientes, especialmente con Taiwán y en el Mar del Sur de China.

Mientras tanto, la campaña anticorrupción de Xi Jinping no está exenta de críticas. Aunque se presenta como un esfuerzo por mejorar la gobernanza, algunos analistas la ven como una herramienta para eliminar rivales políticos y consolidar el poder. Además, las remociones constantes en los altos mandos han generado inestabilidad en un ejército que necesita liderazgo fuerte y continuidad para llevar a cabo sus reformas.

La corrupción en el EPL es más que un problema interno; es un desafío estratégico para China. En un momento en el que el país busca proyectar poder global, estas fallas internas amenazan con debilitar su credibilidad militar. Xi Jinping enfrenta un dilema complejo: resolver problemas estructurales profundamente arraigados mientras navega tensiones internacionales crecientes. La pregunta que queda es si las medidas desde arriba serán suficientes para transformar al ejército chino en la fuerza que el presidente aspira a liderar.

Las cosas como son.

*Mookie Tenembaum aborda temas internacionales como este todas las semanas junto a Horacio Cabak en su podcast El Observador Internacional, disponible en Spotify, Apple, YouTube y todas las plataformas.

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