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El corazón del Amazonas, al borde del colapso por el coronavirus

Tanto los grandes centros urbanos como las zonas más dispersas habitadas por comunidades aborígenes sufren los embates de la COVID-19, con enterramientos de cadáveres en fosas comunes, servicios funerarios al límite y sus sistemas de salud absolutamente desbordados.

Redacción MDZ
Redacción MDZ miércoles, 22 de abril de 2020 · 17:28 hs
El corazón del Amazonas, al borde del colapso por el coronavirus

La pandemia de coronavirus arrasa con rapidez inusitada una de las regiones más delicadas del planeta en cuanto a su biodiversidad: el Amazonas. Tanto los grandes centros urbanos como las zonas más dispersas habitadas por comunidades aborígenes sufren los embates de la COVID-19, con enterramientos de cadáveres en fosas comunes, servicios funerarios al límite y sus sistemas de salud absolutamente desbordados ante el creciente número de contagios y muertes.

La situación es especialmente crítica en la Amazonía brasileña, cuya capital Manaos ha visto triplicar la actividad de los sepelios en solo pocas semanas, con cerca de un centenar de enterramientos por día, según explicó a la agencia de noticias Efe el alcalde de la ciudad, Arthur Virgílio Neto.

Si bien las cifras oficiales hablan de 2.270 casos confirmados y 193 muertes en Amazonas, pero el movimiento en el mayor camposanto de Manaos demuestra que las cifras son mucho mayores que las que recogen las estadísticas del gobierno regional, como advierte el propio alcalde.

Desde hace días las excavadoras avanzan en el cementerio para abrir trincheras con la que hacer frente al aumento de víctimas, mientras que en los hospitales de Manaos funcionarios equipados con trajes blancos, máscaras y guantes trasladan sin pausa los cuerpos sin vida de pacientes que han fallecido por COVID-19. En tan solo una hora, al menos cinco cadáveres fueron sacados de los frigoríficos instalados en las inmediaciones del Joao Lucio, uno de los tres hospitales que dependen del gobierno regional, para su transferencia al cementerio.

Los frigoríficos fueron instalados recientemente después de que salieran a la luz imágenes del interior de un hospital en las que aparecen enfermos de COVID-19 siendo atendidos a escasos metros de cadáveres.

"Es una escena lamentable y una calamidad pública", señala el alcalde de Manaos, una urbe de 1,8 millones de habitantes en medio de la selva tropical más grande del planeta. Por ello, Virgílio Neto ha pedido auxilio a los países europeos para salvar ese estado y su "principal patrimonio", la selva amazónica, que durante meses estuvo en el centro de la agenda internacional ante el aumento de la deforestación y los incendios.

Pero la grave crisis se extiende más allá de las fronteras brasileñas. Así lo advirtió este miércoles la Organización Regional de Pueblos Indígenas del Oriente (ORPIO) del Perú, que teme que el descontrol en esta remota región provoque el contagio de los ticunas y los yaguas, los dos pueblos nativos que tradicionalmente han habitado este espacio fronterizo de la selva amazónica con Colombia y Brasil.

"Estamos muy preocupados por su cercanía a nuestras comunidades, ya que hay dos contagiados por el lado peruano, cuatro en Leticia (Colombia) y once en Tabatinga (Brasil)", informó el presidente de la Federación de Comunidades Ticuna y Yaguas del Bajo Amazonas (Fecotyba), Francisco Cayetano. "A pesar de este peligro las comunidades y los foráneos no respetan la cuarentena (en la ribera peruana) y salen a comprar víveres a Tabatinga y Leticia. Los ticuna corremos un gran riesgo", añadió.

La sensación de desprotección y vulnerabilidad de los ticuna es aún mayor incluso tras conocer la renuncia masiva de personal sanitario acontecida el lunes en el Hospital San Rafael de Leticia, en Colombia, por no contar con artículos de bioseguridad, equipos, protocolos y garantía de pago para el tratamiento de casos de COVID-19.

Precisamente las grandes confederaciones de indígenas amazónicos reclamaron el martes en un comunicado conjunto una mayor protección y cuidado para prevenir y combatir el coronavirus en sus poblaciones por su mayor grado de vulnerabilidad para hacer frente a esta pandemia.

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