A días del regreso de Mariana Fabbiani a la pantalla con DDM, un paro de los trabajadores de canal América por un reclamo salarial dejó a la vista lo que se venía cocinando desde hace un tiempo: los roces entre Florencia de la V y su colega.

Lo cierto es que la relación entre la conductora de Intrusos y Mariana Fabbiani no es la mejor, y a pesar de que las conductoras comparten estudio y sus programas son “vecinos”, sus producciones hacen lo imposible para que las mujeres no se crucen en el piso.

Así lo contó Mariana Brey en Socios del espectáculo luego de que Fabbiani apareciera en el medio de una nota de Florencia de la V a causa de un micrófono abierto, desperfecto técnico que se dio en una de esas jornadas caóticas signadas por la falta de personal. 

"Por las dudas lo aclaro, para que todos los que estamos en el piso podamos comprender, que tenemos que estar en silencio hasta que empiece el otro programa porque estamos en vivo. Como estamos de paro, estamos haciendo programas especiales y todo sale como se puede", “retó” Flor a la Fabbiani.

Así las cosas, Mariana Brey sostuvo que la rubia no se había percatado de su blooper en ese momento. “Mariana nunca se enteró, es más, les avisaron al rato, cuando apareció el tape en las redes”, contó. 

El acuerdo tácito entre Mariana Fabbiani y Florencia de la V

“Mariana siempre se pone el micrófono y ve la rutina por fuera del canal, casi en la calle, les diría. Hay un acuerdo de no cruzarse", señaló la panelista de El Trece, y dijo más: “No hay cruce ni de mirada. Incluso, cuando termina Intrusos, se pasa un tape de siete minutos que permite que salga una y entre otra, sin cruzarse".

Sin embargo, la periodista comentó que ni una ni la otra explicó públicamente por qué se detestan desde hace años. Asimismo, ambas se muestran muy diplomáticas y profesionales cada vez que se ven obligadas a verse por las circunstancias. 

"Es algo de compromiso, se han saludado falsamente más de una vez, pero si se pueden evitar, mucho mejor", indicó Brey, al develar los detalles de esta guerra silenciosa que se da en el canal de Palermo entre las colegas que no se pueden ni ver.