Andy Kusnetzoff contó por primera vez los maltratos que sufrió trabajando con Pergolini
El conductor reveló los padecimientos que sufrió en sus inicios.
Brilla en cada aparición, en todos los formatos que afronta, ya sea en la radio, la televisión e incluso el teatro. Andy Kusnetzoff disfruta de un presente cálido, con una montaña de desafíos profesionales, que ratifican su evolución indetenible.
El hombre de Podemos hablar buceó en su pasado y sacó del arpón de los recuerdos una experiencia muy traumática que padeció en carne propia en sus primeras incursiones en la industria, cuando se sumó al equipo de trabajo que comandaba Mario Pergolini.
La relación del ex Caiga quien caiga y Andy transitó por largos años de distancia, que lucía insalvable, prácticamente estuvieron enemistados. Empero, hace un tiempo limaron asperezas y se acercaron con una entrevista muy visualizada que aconteció en Perros de la calle.
En definitiva, Kusnetzoff acaba de narrar una trama muy fuerte en su ciclo radial, cuando le dijo a su compañera Sofía Martínez: "¿Sabés cómo eran mis reuniones creativas con (Diego) Guebel, Pergolini y eso?". Una introducción a esa etapa compleja.
Así, el blondo describió el sufrimiento que lo atravesó en su primer trabajo en la producción de La TV Ataca: "Yo tenía 21 años, era el más chico de todos y estaba ahí. Sin título, era el productor creativo. Me llamaban a la reunión que eran todos grandes y yo recién empezaba. Pero lo que hice toda mi vida es tirar ideas”.
Sobre las burlas de mal gusto de las que fue víctima, Andy contó: “Me llamaron a la reunión creativa. Voy, 21 años, una oficina chiquita en Canal 9. Estaba Mario, estaba Guebel, estaban todos los capos y yo que era el más chico y que recién empezaba, pero (decían) 'que venga Andy a tirar ideas'”.
Y para graficar en toda su dimensión lo que acontecía entre esas cuatro paredes, Kusnetzoff exteriorizó. “Entonces en un momento era: uno tiraba una idea y si no te gustaba te ponían el encendedor y un Axe (hace el gesto de apuntar un desodorante a la cara) y salía una llamarada como que 'noooo'. Me crié en la cancelación”.