Rodolfo Barili reveló detalles de su durísima infancia: "Mi papá me abandonó a los..."
El conductor de Telefe Noticias reveló que a sus 7 años sus padres se separaron y su mamá se hizo completamente cargo de él y de su hermana.
Si hay algo que Rodolfo Barili tiene muy en claro es que todo lo que hoy es, se lo debe a su mamá, Antonia. Porque fue ella, con su sueldo de docente, quien terminó criando sola a sus hijos cuando se separó y su marido se desligó de sus responsabilidades parentales.
Así lo contó el conductor de Telefe Noticias en diálogo con María Laura Santillán en una charla en la que se abrió y contó, como nunca, detalles de su vida y de su conmovedora historia.
Rodolfo tenía alrededor de siete años y todavía se acuerda de ese domingo por la mañana cuando ella le dijo, cuando iban a misa: “Mamá tomó la decisión de separarse de papá”. “Yo soy como papá el 10 por ciento de lo que fue mi vieja como mamá. Para entender, yo vine a estudiar Buenos Aires con el sueldo de una docente”, dijo.
El compañero de Cristina Pérez contó que su mamá hacía magia con ese magro ingreso que ganaba dando clases y que en su pueblo, Rauch, “siempre hubo gente que ayudó”: “Había una asociación becaria en el pueblo, de la que hoy formo parte, ayudando. Eran dos pesos, pero era una fortuna para mí”.
“Nunca faltó nada de lo importante”, aseguró Barili y señaló que su madre siempre le enseñó que había gente que tenía menos que ellos. Así, aprendió a compartir: “A la casa de mi abuela llegaban Los Reyes que traían las bicicletas”.
“Cuando yo dejaba de usarla, mi vieja me llevaba a la casa de alguien que no tenía bicicleta a entregarla, para que alguien pudiera disfrutarla. Siempre entender que hay alguien que la pasa peor que vos”, relató.
“Mi vieja fue mamá, papá. Mi vieja tiene una marca ética, moral, que a mí me resulta admirable”, destacó el entrevistado, que a los 50 años anunció que pronto se va a casar con su novia, la abogada Lara Piro.
Rodolfo explicó que no fue fácil darse cuenta de que lo que vivió con su hermana Silvina en su infancia fue “casi un abandono”, como él definió. Hoy, dice, tiene las cuentas saldadas: “No hay nada. Soy de San Lorenzo por el abuelo y por él. Lo que no pudo hacer, no pudo. Tuve a mi vieja y yo soy lo que soy gracias a mi vieja. Si él hubiera estado todos los días en casa, no sé si yo hubiera sido eso”.
Sin embargo, aclaró que, después de dejar la casa, su padre iba una vez por año a Rauch a verlos y que incluso su mamá quiso revincularlos y que pasó varias vacaciones en Buenos Aires. “Empecé el secundario, lo vi antes de empezar a estudiar acá, una vez”, recordó.
A pesar de esos intentos, la relación no fluyó y hoy las preguntas sobre esa ausencia se acumulan en su mente y en su corazón. “Hay cosas que con el tiempo me resultan inexplicables. Yo muero por un abrazo de mis hijos. Muero por saber. ¿Cómo hacías para levantarte a la mañana y no preguntarte cómo estaban tus hijos?”, indicó el papá de Benicio y Dante.
“¿Cómo fue tu día sin saber qué había hecho yo, qué había hecho Silvina ese día? ¿Cómo hacés para vivir sin preguntarte ´cómo estará mi hijo´? Eso es lo único que no tengo respuesta. Pero no guardo ni enojo, ni rencor ni nada”, cerró.

Julio Chávez se refirió nuevamente a la polémica con Ricardo Darín

El motivo por el que un programa de canal Améric no salió al aire el viernes

Sol Pérez se defendió de la severa crítica de una seguidora

El curioso video Mariano Martínez que despertó una ola de suspiros

La propuesta polémica de una influencer argentina en OnlyFans

Otra vez Mauro Icardi acusó públicamente a Wanda Nara en sus redes sociales

Flor Vigna fue estafada y ahora no quiere salir de su casa: qué le pasó
