La inquietante experiencia sobrenatural que contó Carlos Sánchez antes de morir
En una entrevista con Beto Casella, el humorista había contado una impresionante historia relacionada con su padre. En la nota, los detalles.
El humorista Carlos Sánchez falleció este martes a los 68 años tras luchar contra un cáncer de riñón, con el que transitó más de diez años. En el programa Bendita (El Nueve) homenajearon al actor con un informe especial que incluyó una impactante revelación sobrenatural de la muerte.
“Creo que en esta vida estamos de paso y tengo un ejemplo con mi viejo, porque no creo en la muerte, no le tengo miedo. Estaba mi vieja en la cocina, mi hermano estaba leyendo, yo estaba mirando televisión y mi hijo Emiliano y mi sobrino Nicolás estaban jugando a las cartas”, había contado Sánchez en una entrevista que mostró en su programa Beto Casella.
Luego agregó: “Suena el teléfono, papá ya estaba mal, llegamos a la terapia del Hospital Español y golpeo la puerta. Sale una enfermera y me dice ‘ahora lo atiende el doctor, no sé qué pasó, estaba muerto, lo empezamos a desconectar pero empezó a respirar de nuevo y te está llamando’”.
“¿Sabés que me morí?”, le dijo a su padre a Sánchez al verlo a los pocos minutos. “No papá, estabas soñando”, le respondió el humorista. “No, me estaban sacando todo y yo estaba allá arriba mirando”, le aseguró el hombre. “No viejo, era un sueño”, retrucó el cómico.
Y allí fue cuando su padre hizo una impactante descripción: “No hijo, ustedes estaban en el departamento: mamá estaba en la cocina, vos estabas mirando televisión, Mario estaba leyendo, y Nico y Emi estaban jugando a las cartas”.
Al finalizar, Carlos Sánchez aseguró: “Yo no lo podía creer. Me agarra la mano, me da un beso, y me dice ‘cuidala a mamá’. Y se quedó. Yo sé que el día que no esté más vivo lo voy a volver a encontrar. Entonces disfruto la vida porque sé que lo que puede llegar a pasar después va a ser lindo”.
Sobre el derrotero en su salud, el humorista había comentado años atrás el humorista: “En 2010, mi maravillosa mujer y el doctor me obligaron a hacerme un chequeo. Yo nunca en mi vida me había hecho uno y me encontraron un tumor en el riñón. A los 12 días estaba internado sacándomelo. Ocho meses después me hice otro chequeo y no me dio absolutamente nada, porque el tumor estaba encapsulado y estaba todo bien. Y, en un acto de soberbia mío y de no hacerle caso a mi mujer, de ir a un oncólogo, nunca me hice más nada”.