Crítica

Tejido en Tiempo de Vendimia: un buen show bajo el lastre del eterno dilema

La directora Alicia Casares conquistó notables logros en la puesta de esta nueva edición del Acto Central de la Vendimia. Un guión con personajes trazados sin mayor solvencia, intentó darle una vuelta de tuerca a las repetidas postales que vemos cada año sobre el escenario del Frank Romero Day.

domingo, 10 de marzo de 2019 · 13:11 hs

Hay que decirlo sin vueltas. Más allá de que periodistas y espectadores persistentes del Acto Central de la Vendimia, nos quejemos una y otra vez de la repetición de clichés temáticos, con los consabidas viñetas que aparecen año a año como una sucesión de postales en loop eterno; el espectáculo mayor de nuestra provincia nunca va a desatarse de los tópicos que lo han transformado en un museo obsoleto a gran escala.

El eterno dilema está sin dudas enquistado en el guión. Es cierto que a lo largo de décadas se ha indagado en diferentes vertientes dramatúrgicas. Pero ya sea desde un abordaje poético, frecuentemente empastado por las voces de locutores que hacen abuso del énfasis expresivo para terminar ahogando las palabras, o desde una impronta más teatral como la de Tejido en Tiempo de Vendimia, con un guión de Miriam Armentano que fue por la vía de una trama con tres personajes centrales y un narrador; el asunto casi nunca termina de cuajar. Las fervorosas ovaciones del público frente a los cuadros con mayor despliegue de artistas en escena, sumada a la ya consolidada eficacia y potencia de la música en vivo, hacen pensar que lo más viable para un Acto Central climático podría ir por el camino de un gran musical con una estructura narrativa prácticamente secundaria. Parece una herejía hablar de un hecho escénico que prescinda de una dramaturgia sólida, pero hemos llegado a un punto en que los lugares comunes (que a esta altura hasta produce pereza enunciarlos), se han impuesto definitivamente, sin dar margen a alguna reinvención posible. Por lo tanto, y mal que les pese a quienes sueñan con una suerte de "revolución artística" en el Acto Central de la Vendimia, lo único que queda es transitar sus convenciones sacando el máximo lucimiento posible del arsenal de recursos artísticos y técnicos disponibles.

Acto central
Acto central

En términos de puesta, la directora Alicia Casares conquistó algunos notables logros junto a su equipo creativo. Al esmerado trabajo coreográfico capitaneado por Virginia Paes, se sumó una aceitada labor de dirección musical, arreglos y composición de Mario Galván, que se potenció con un ensamble de algunas de las más destacadas voces de nuestra provincia. Pero la gran sorpresa la dieron este año las visuales en pantalla, una deuda pendiente de anteriores ediciones, que finalmente quedó saldada con un bellísimo y creativo despliegue de animaciones en 2D y 3D craneado por el Estudio MOTIA. El retorno de un exquisito andamiaje de teatro de sombras a cargo de la Compañía Pájaro Negro y el inspirado diseño de vestuario de Norberto Lateana, terminaron de redondear los hallazgos plásticos. Mientras la inclusión de artistas aéreos, bajo la responsabilidad de Facundo Pennesi, con la chance de integrar a sus figuras dentro de la escena y no como mero ornamento lateral, fue otro de los aciertos de esta propuesta. Como marco y soporte general, la escenografía de Gabriela Bizón supo integrar a la perfección las cuatro pantallas que rodean el espacio central junto a las legendarias cajas lumínicas, y también logró destacar visualmente el protagonismo de los músicos en vivo.

Acto central
Acto central

A nivel de síntesis técnica y artística, Tejido en Tiempo de Vendimia no evidenció mayores fisuras. Los únicos momentos que lucieron anémicos, estuvieron vinculados a un concepto dramatúrgico que pretendió enfrentar el surgimiento de un romance en plena cosecha con los designios de un personaje de fantasía, el "Tejedor de Destinos", interpretado por el talentoso bailarín Iván Keim (hijo de la directora Alicia Casares, y artista que ha labrado una contundente carrera profesional dentro y fuera de nuestro país). A pesar de la lluvia, Keim enfrentó el titánico desafío de participar en numerosos cuadros coreográficos e incluso sumarse al equipo de destreza aérea. Tanto él, como todo el staff de bailarinas y bailarines, debieron sortear tropiezos y porrazos, haciendo lo imposible sobre el mojadísimo piso del escenario del Frank Romero Day. Su performance y la de sus compañeros protagónicos, Laura Masuti y Rubén Antinori Piticchio, sumados al narrador encarnado por Nicolás "Godo" Giménez, quedó a merced de algunos baches, sobre todo en las instancias en que permanecieron casi a solas en la puesta. Por supuesto, esas falencias no tienen que ver con la impericia escénica de estos protagonistas, sino con un texto que no logró contenerlos ni trazarlos con mayor precisión. El espectáculo apuesta a la presencia casi permanente de algunos o todos los integrantes de este cuarteto, por lo tanto que las tensiones entre el "Tejedor de Destinos" y la dupla romántica no tuvieran la suficiente fuerza, inclinó el devenir argumental hacia un progresivo desgano, que tuvo que ser sistemáticamente apuntalado a pura tracción de talento de las 852 almas en escena; que le insuflaron vida a una historia que no logró sobrepasar los límites de las buenas intenciones.

Final acto central

Integrantes del staff de Tejido en Tiempo de Vendimia

Guionista: MIRIAM ARMENTANO

Dirección General: ALICIA CASARES

Asistencia de Dirección: NURIA ATENCIO

Dirección Coreográfica: VIRGINIA PAES

Asistencia de Dirección Coreográfica: MARCELA NADAL

Coreógrafos de Folclore: HECTOR GOMINA y DAMIÁN ROMERA

Coreógrafa de Contemporáneo: MARIELA SCHERBOVSKY

Dirección Actoral: MIGUEL CALDERÓN DÍAZ y FEDERICO CASTRO

Dirección Musical, Arreglos y Composición de Música Original: MARIO GALVÁN

Codirección Musical y Asistencia de Dirección Musical: PATRICIO IBIRE

Escenógrafo: GABRIELA BIZÓN

Codiseñador Escenográfico: VICTOR CARRION

Responsable de Cajas Lumínicas: EDUARDO GONZALEZ

Jefe Técnico: EDUARDO GRZONA

Productor Ejecutivo: MARCELO RIOS ROIG

Asistencia de Producción Ejecutiva: FLORENCIA RIOS LUCERO

Jefa de Traspuntes: MIRTA RODRIGUEZ

Responsable de Aéreo Artístico: FACUNDO PENNESI

Responsable Seguridad Aérea: GUSTAVO LOPEZ

Responsable de Utilería Menor: DAMIAN BELOT

Asistencia de Utilería Menor: DANIELA QUINTEROS

Responsable de Utilería Mayor: LUCIANO CORTES

Responsable de Video Filmación Artística: MARIA JULIA POSADA

Jefe de Vestuario: NORBERTO LATEANA

Asistencia de Vestuario: MYRIAN SEQUEIRA

Ingeniero en Seguridad: MARTÍN BALASTEGÜI

Monitores Contemporáneos: ARIADNA PAZZAGLIA, VERÓNICA ALSINA y LEANDRO TOBARES

Monitores Folclóricos: VANINA GISELA MENDEZ, JEREMÍAS TELLO, MARTÍN VILLARUEL, ADRIANA CALVET, GASPAR TELLO y GIOVANA TOMBA NADAL

Coordinador de Bailarines con Discapacidad: FABIÁN QUIROGA

Monitora de Bailarines con Discapacidad: VERONICA ETURA

Monitores de Actores: CRISTIÁN CORIA, GUSTAVO CORTEZ y JORGELINA JENON

Monitoras de Teatro Aéreo: FERNANDA TROMBETA y MARÍA VICTORIA FAVIER

Diseño y Asistencia de Luces: DARIO MAD

Diseño y Asistencia de Sonido: JOSE EDGARDO SEGOVIA

Responsable en Efectos Especiales: HECTOR NADAL

Encargada de Maquillaje: CECILIA CAROFF

Responsable Guión Televisivo: SERGIO SANCHEZ

Asistencia de Maquillaje: MARCOS SUAREZ, ROCIO ESCODA y FERNANDO GARCIA