¡Subí el volumen! Escuchá cómo suena esta Dodge Dakota V8 Hellcat

La firma Mopar es conocida en la marca Dodge por sus imponentes motores y desarrollos, entre los cuales se destaca la denominación Hellcat, que durante muchos años fue sinónimo de muscle car americano y acompañó a modelos como Charger, Challenger y hasta el SUV Durango. 

Lo más importante y poderoso de Hellcat viene de la mano de la motorización, que hoy está disponible por ejemplo en la bestial pick up RAM 1500 TRX. Sin embargo, esa denominación nunca llegó a acompañar al modelo Dakota, una pick up mediana posicionada por debajo de la RAM que fue discontinuada en 2011 tras tres generaciones. 

Sabemos que en Estados Unidos, cuando se trata de fierros y autos americanos las cosas pueden llegar a potenciarse y por eso no nos sorprendió encontrar una Dodge Dakota usada con una particularidad bajo su capot: está equipada con un motor Hellcat de 6,2 litros, en uno de los ‘swaps’ más impresionantes que pueden realizarse en un vehículo de índole utilitaria. 

La empresa que estuvo a cargo de esta increíble transformación es Boosted Motorsports, que a su vez documentó todo el proceso en su cuenta de Instagram. Esta Dodge Dakota de color azul recibió diversos componentes modernos de la firma Hellcat, incluso en el interior. El resultado final es una camioneta que funciona como si estuviese original, pero que puede llegar a espantar y sonrojar a cualquier deportivo en un semáforo, gracias al sonido erogado por su imponente mecánica. 

Más allá de la incorporación del 6.2 supercargado que produce unos 700 HP y se combina en este caso a una caja automática de ocho velocidades, la Dodge Dakota recibió algunas modificaciones en el aspecto exterior, aunque no demasiado llamativas. El color azul resalta mucho sus líneas y las llantas de color negro contrastan muy bien con el diseño de la carrocería. El último detalle por fuera es la calcomanía que indica la cilindrada del motor y las siglas SRT, otra identificación utilizada por la marca del carnero para sus versiones más potentes. 

Lo más llamativo, además del motor, es el interior que luce como el de un auto moderno ya que toma todo el instrumental, plancha de a bordo y consola central de un Dodge Charger SRT Hellcat. Incluso también comparte butacas y volante, dándole al habitáculo un look que acompaña muy bien al cambio de corazón. Por último, los responsables del proyecto decidieron darle un nombre muy particular a su creación: “Hellkota”.