Mdz al volante

Probamos el nuevo Renault Logan: soñado para Uber

Nos subimos a la versión Intense del sedán chico de Renault. Lanzado en noviembre pasado, tiene nuevo motor y algunas mejoras de seguridad. En lo que sigue siendo imbatible es en la habitabilidad: es excelente.

Cristian Ortega lunes, 13 de enero de 2020 · 16:29 hs

Plazas traseras enormes y comodísimas y un baúl gigantesco, las grandes cualidades con las que irrumpió el Renault Logan en nuestro mercado en el 2007, se mantienen en este nuevo rediseño del modelo, lanzado en noviembre del 2019, y eso es una gran noticia.

El Logan es un auto ideal para el trabajo. No hay que ser un genio para darse cuenta de que para taxi, remís u Uber, el Logan es soñado. Es grande, cómodo, simple, robusto, espartano como toda la familia Duster/Sandero/Stepway/Logan.

Todas estas sensaciones son un resumen tras nuestro test gracias a Renault Mediterráneo, único concesionarios oficial de la marca en Mendoza.

Nos prestaron un Renault Logan 2020 versión Intense manual. Es casi el tope de gama, que se corporiza en un Intense con caja automática CVT y look aventurero, con mayor despeje del suelo.

Las sensaciones de manejo son buenas. El Logan y sus parientes de familia nunca se caracterizaron por ser gacelas trotando por el prado. El andar es correcto, se lo nota robusto y bien armado, rústico y con materiales durables, aunque algo ásperos al tacto.

El tablero y la pantalla con Media Nav no ha cambiado, ambas cosas siguen cumpliendo la función sin mayores problemas.

Lo que sí cambió fue el motor, aunque se trata de un concido. Ahora el Logan (y toda la familia) tienen el HR16 1.6 16v SCe, que Renualt ya vienen utilizando en las Captur y Kangoo. El impulsor tiene 115 cv de potencia y 156 nm de torque. En todos los casos se combina con con caja manual de cinco velocidades (excepto los Intense CVT mencionados).

No hay grandes diferencias con el motor anterior, ya que, como aquel, siempre responde bien y rápido teniendo en cuenta la potencia. Es un impulsor sin dudas correcto para el tipo de vehículos y un uso racional.

En el apartado seguridad, el Logan adoptó dos airbag más, lo que celebramos, aunque el ESP sólo está disponible para las verciones CVT de la familia. Una lástima.

Estéticamente el Logan no cambió. Sigue siendo un auto agradable, al menos desde el 2013, cuando se dejó de lado el estilo “heladera” de la primera generación.

El Logan, como decíamos al principio, es un auto que se puede perfectamente poner a trabajar. El baúl, de 510 litros, soporta perfectamente un tubo grande de GNC. Su habitabilidad a su vez es una gran cualidad que se agradece en los vehículos de alquiler. A esto hay que sumarle la simpleza mecánica y la robustez del modelo.

En conclusión, el Logan está vigente, es una interesante propuesta para uso particular, familiar y comercial y cuenta con cualidades muy valoradas por el cliente argentino. Asimismo, más allá de la ausencia de ESP en la mayoría de la gama, la actualización es valorable y lógica. Si tiene dudas, amigo lector, como decimos siempre, no dude en probar el auto, en el concesionario tiene unidades para test drive.

Ficha técnica

Motor: naftero

Cilindrada: 1.6 litros

Potencia: 115 cv

Torque: 156 nm

Consumo mixto: 9,5 litros/100 Km

Precio: desde 870.200 pesos

Dónde encontrarlo: Renault Mediterráneo

Archivado en