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Las mejores telas y estilos de cortinas para cada ambiente de tu casa

Tipos de tela, colores y largos que funcionan para distintos espacios. Lo que tenés que saber antes de comprar tus cortinas.

El truco simple que hace tu casa más acogedora.

El truco simple que hace tu casa más acogedora.

Las cortinas no solo sirven para filtrar la luz o dar privacidad, también son una manera de vestir las ventanas con personalidad, sumar textura y lograr que una habitación se sienta más cálida, más viva. No hace falta gastar una fortuna ni ser experta en decoración; con el género justo y una elección bien consciente, verás que todo cambia.

Una de las claves está en pensar la tela como si fuera una prenda. ¿Qué estilo tiene tu casa? ¿Buscás algo minimalista, bohemio, sofisticado? Las cortinas, como un buen abrigo, deben acompañar esa identidad. En ambientes luminosos, los linos y algodones livianos dejan pasar la luz y generan una atmósfera suave. En espacios que necesitan más oscuridad o presencia, los géneros pesados como el terciopelo o la pana aportan cuerpo y drama.

También hay que animarse a jugar con el largo. Las cortinas que tocan el piso, incluso que se arrastran un poco, dan sensación de lujo y hacen que un espacio chico parezca más grande. Si preferís algo más práctico y funcional, las tipo roller o romanas van bien, sobre todo en cocinas o escritorios. Si el objetivo es sumar calidez, las cortinas con caída natural son insuperables.

El color también importa. Los neutros como el blanco roto, el arena o el gris perla combinan fácil con todo y no saturan. Si querés darle más protagonismo, los tonos como el verde seco, terracota o azul petróleo están de moda y funcionan muy bien para cortar con lo clásico. Un estampado sutil, como rayas finas o motivos botánicos, puede ser ese detalle justo que no abruma, pero suma.

Las cortinas logran destacar cualquier ambiente del hogar.
Las cortinas logran destacar cualquier ambiente del hogar.

Las cortinas logran destacar cualquier ambiente del hogar.

Además, las cortinas no son solo un elemento decorativo, ya que influyen directamente en cómo se percibe el clima del hogar. Ayudan a mantener la temperatura, suavizan los ruidos del exterior y dan sensación de refugio. Revestir una ventana con una buena cortina es como completar un look con un accesorio perfecto. Puede parecer algo menor, pero cuando lo ves terminado, todo se siente más armónico.