Despedí junio con estos rituales de invierno y renová tu energía
Ideas simples y poderosas para cerrar el mes, soltar lo viejo y atraer nuevos comienzos. En la nota los 4 rituales para arrancar julio cargado de energía.
Para despedir junio con buena energía y arrancar la segunda mitad del año con las pilas renovadas, muchos realizan rituales de limpieza. Leelos en la nota.
CanvaMientras junio llega a su fin y el invierno está instaladísimo en el Hemisferio Sur, muchas personas buscan espacios de introspección y renovación energética. En Argentina, el sexto mes del año no solo marca el punto más frío del calendario, sino también un momento propicio para detenerse, revisar lo vivido y preparar el camino para lo que viene.
Desde tiempos ancestrales, distintas culturas han asociado esta época con rituales de purificación. En el mundo andino, por ejemplo, el Inti Raymi (la fiesta del sol) celebra el retorno de la luz tras la noche más larga. Inspirados en esta mirada cíclica, muchos argentinos incorporan hoy prácticas sencillas pero simbólicas para cerrar el primer semestre con conciencia y propósito.
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Los rituales para hacer los últimos días de junio
Uno de los rituales más populares es escribir lo que se quiere dejar atrás. Puede tratarse de emociones, situaciones o hábitos. El papel se quema en un recipiente seguro, acompañado de una vela blanca y una infusión caliente, ideal para la estación. Esta práctica ayuda a soltar lo que ya no tiene lugar y dar paso a nuevas intenciones.
Otra opción frecuente es la limpieza energética del hogar. Se recomienda ventilar los ambientes, sahumar con palo santo o hierbas como romero y laurel, y reorganizar los espacios para generar una sensación de renovación interior. En este tipo de rituales, el invierno invita al recogimiento, al cuidado personal y a reconectar con lo esencial.
El baño de descarga, preparado con agua caliente y sal marina, también es muy utilizado. Se le pueden agregar gotas de lavanda, romero o eucalipto. Esta práctica es ideal para quienes sienten el cuerpo cargado o atravesaron un mes emocionalmente denso. El agua no solo limpia físicamente, sino también simbólicamente.
Finalmente, la visualización de intenciones es una práctica que gana cada vez más seguidores. Al cerrar los ojos, con una manta y una taza de té en mano, se imagina cómo se quiere vivir lo que resta del año. ¿Qué emociones se desea cultivar? ¿Qué metas se quiere alcanzar? Escribirlas y colocarlas en un frasco o caja puede ayudar a mantener el foco.