Seis formas alternativas de agregar color pintando sólo de blanco
A veces el blanco total está bien. Entonces, qué alternativas existen para darle color a la casa sin pintar las paredes.
Elegir el color blanco para pintar la casa es optar por la belleza simple y pura. Es una alternativa que siempre estará vigente y las siguientes 6 alternativas se proponen darle color a la vivienda sin pintar las paredes (porque a veces el blanco total está bien).
Con arte y tapices de gran tamaño. La idea es que lo que cause impacto en la pared no sea algún color de pintura sino que piezas de arte de gran tamaño que se puedan usar para causar un gran impacto en las habitaciones.
Un cabecero llamativo. Una cabecera tapizada llamativa puede darle un toque sorprendente a una habitación pintada de blanco. Así el cabecero le permite agregar color, patrón y textura a la pared de una manera no permanente que le da un toque acogedor a la habitación. Los cabeceros tapizados son particularmente efectivos en este caso, sobre todo si introduce telas ricas como terciopelo o linos con estampados vibrantes.
Carpintería y gabinetes pintados. Pintar la madera o los muebles de una habitación transformará instantáneamente el aspecto y la sensación de toda la habitación. Los gabinetes y molduras pintados son fáciles de actualizar, lo que les permite experimentar con las tendencias de color sin un gran compromiso. Le brindan todo el control sobre el estilo de su espacio sin la permanencia de un tratamiento de pared completo.
Cortinas de piso a techo. Las elegantes cortinas que van desde el piso hasta el techo pueden crear una pared de color por sí solas, sin necesidad de pintura. Optar por cortinas en un tono intenso o con un estampado llamativo añade personalidad y transforma el ambiente de la habitación.
Con azulejos. Porque ofrecen una forma duradera, lavable y personalizable de incorporar color. Existen muchas formas inesperadas de usar azulejos para crear un elemento único y casi arquitectónico en una habitación.
Muebles y alfombras. Una forma de agregar color es con una pieza llamativa en cada espacio. Por ejemplo un sofá azul intenso o un sillón rojo, para introducir una sensación de minimalismo colorido. O bien, una alfombra vibrante para que no sólo cubra el suelo sino que también aporte un toque de color a la habitación. Más información.