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Cinco rituales simples para cambiar la energía en primavera

La primavera significa, como su nombre lo indica, la primera estación del año. Con ella se produce el comienzo del ciclo de cambios que hay en el planeta. Te proponemos en esta nota cinco actividades para que la energía de tu cuerpo y tu casa se renueven en este día especial.

MDZ Sociales
MDZ Sociales martes, 21 de septiembre de 2021 · 16:16 hs
Cinco rituales simples para cambiar la energía en primavera
Descontracturarse y hacer algo especial para recibir esta primavera es la consigna.

La primavera siempre ha sido una fecha que a lo largo de la historia no ha pasado desapercibida por los distintos grupos, tribus e imperios de la humanidad.

Es así: los cambios sorprenden y siempre les buscamos explicación, es por esto que las civilizaciones antiguas trataron de entender los episodios de la naturaleza.

En cuanto al equinoccio de primavera, como es el momento del renacer, del fin de la hibernación, de los brotes... siempre se lo tomó como un momento crucial. Cuatro curiosidades históricas que seguramente no sabías grafican la importancia que siempre ha tenido la llegada de la estación del florecimiento:

  1. Los egipcios construyeron la esfinge de tal forma que estuviera alineada durante el equinoccio de primavera.
  2. Los mayas hacían rituales durante el equinoccio de primavera para adorar a su dios Kukulkán y a la diosa que representaba a la Tierra, además de que era el momento más importante para la cosecha del maíz.
  3. Muchos pueblos paganos celebraban el Ostara, que era una fiesta celta para las diosas de la fertilidad y el sol.
  4. Los griegos en su mitología explicaban la llegada de la primavera diciendo que era la llegada de Perséfone a visitar a su madre Deméter, la diosa de la agricultura y la fertilidad. Como Perséfone tenía que vivir en el inframundo con el dios Hades, durante ese período no había cosecha, pero al regresar todo volvía a la vida. 

Cinco rituales sencillos para que hagas hoy

Ritual de armonía: es simple. Consiste en limpiar, reciclar, “sacudir” algún lugar de la casa que tenés olvidado. También es un día para cambiar cosas de lugar o redecorar, para que el aire, el sol y la energía roten y se renueven las buenas ondas.

Tip: si tenés piedras energéticas, es el día especial para ponerlas al sol un rato con un poquito de agua, para que recarguen energías del universo.

Ritual para la prosperidad. Simpleza total: comprar una planta para tu hogar. Grande, chica, de interior o exterior... lo importante es incorporar una planta en tu casa hoy. Las plantas siempre han estado vinculadas con las ceremonias y rituales en la historia de la humanidad y son vida misma que incorporás a la tuya.

Una pequeña planta hace la diferencia.

Ritual para la pureza: Para los mayas, la llegada del mes de las flores se dedicaba a la diosa Coatlicue -madre de la tierra-. En su nombre se hacían meditaciones, por lo cual tomarte un momento de paz, como por ejemplo un baño de inmersión con hierbas o esencias, y prender un incienso o vela aromática focalizando en que todo lo malo se aleje de tu cuerpo y tu vida te servirá para limpiar cuerpo y mente.

Un momento de relax y reflexión individual.

Ritual de la felicidad: todos tenemos recuerdos de juegos de niños, o situaciones graciosas que nos han hecho reír a carcajadas y pasar un momento de gran alegría. La idea es hoy recrear con amigos, pareja o familia uno de ellos. Aunque nos parezca tonto, jugar un ratito a la escondida, o al ladrón y al policía siendo adultos puede divertirnos a rabiar y rejuvenecernos.

Algodón de azúcar: ¡qué rico!

También puede servir hacer algo que, cuando niños, nos daba extrema felicidad: comprarnos un algodón de azúcar, cantar y bailar, hacer una carrera de embolsados con amigos o hijos... conectarnos con ese momento en que sentimos tremendamente que estamos vivos.

Una simple dinámica con una vela.

Ritual de bendición del futuro: tomar un papel, un lápiz, escribir allí anhelos, sueños, metas, deseos, objetivos... prender una vela blanca pequeña y quemar ese papelito en el exterior, o en un lugar en donde ese humo suba al cielo. Luego entrar la velita y dejarla encendida hasta que se consuma. 

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