Diana de Gales tiene una nueva heredera y aquí está la prueba

Kitty Spencer, la hija del hermano menor de Diana de Gales, se consolida como modelo, y a los 30 años la aristócrata y socialité británica impone su estilo noble y moderno.

El glamour de la primogénita de Charles Spencer fue centro de todas las miradas durante la boda de Harry con Meghan Markle, y esa aparición fue plataforma de despegue de la carrera en el mundo fashion de la sobrina de Diana, hija de la también modelo Victoria Lockwood.

Cierto parecido físico y, especialmente, su aura sofisticada y angelical es la que identifica a Kitty Spencer con la Lady Di.

Kitty (tenía 7 años cuando murió la “reina de corazones”) trabaja para firmas top, como Dolce & Gabbana -es embajadora internacional de la firma italiana- y la joyería Bulgari.

Además, esta temporada se animó a invocar a Lady Di a través de una producción de Dolce & Gabbana que replicó el icónico shooting de Vanity Fair, con imágenes de la Princesa Diana tomadas por el fotógrafo top peruano Mario Testino, en el año 1997.

El mismo sillón, el vestido negro, las joyas, y el pelo recogido… Como Diana, 25 años después Kitty miró a la cámara y el efecto revival fue inmediato.

Imposible no volver a ver a Lady Di en esas imágenes protagonizadas por Kitty Spencer que se atrevió a dar el paso que faltaba para identificarse con el símbolo fashionista número uno de la realeza europea del siglo XX.

Kitty es la mayor de los hermanos Spencer: las mellizas Amelia y Eliza también son modelos, y tiene dos hermanos, Louis y Samuel Aitken (hijo de la madre de Kitty y de su ex marido Jonathan Aitken), que acaba de integrarse al staff de la agencia Model Management.

Su condición de royal es parte de su esencia y seña particular de su estilo, tal como lo demostró en su reciente aparición en la gala de la Real Academia de Artes de Londres en la que lució como toda una princesa moderna, con otro look de Dolce & Gabbana que hizo recordar a la sutil sofisticación de Diana de Gales.