La gente sobrevive como puede y la casta no paga costos
Si bien el Gobierno insiste con que hay una importante recuperación económica, cuando uno observa el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE), puede ver que desde diciembre la economía tiende a estancarse.

"La actividad económica no se está recuperando en forma pareja en todos los sectores de la economía".
Si bien el Gobierno insiste con que hay una importante recuperación económica, cuando uno observa el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) que publica el INDEC, puede ver que desde diciembre la economía tiende a estancarse.
Obviamente que siempre hay sectores a los que le va mejor y sectores a los que les va mal. Puede aumentar el patentamiento de autos, las escrituras de inmuebles o la venta de nafta premium, pero, al mismo tiempo, pueden caer las ventas de los supermercados, las ventas mayoristas o las de las bebidas sin alcohol.
Te Podría Interesar
Disparidad en la actividad económica
En otros términos, la actividad económica no se está recuperando en forma pareja en todos los sectores de la economía. Hay mucha disparidad entre los diferentes sectores.
De hecho, cuando se toma el promedio de todos los sectores, la economía argentina está estancada desde 2011. Llevamos 14 años de estancamiento económicos.
Este estancamiento económico implica que, entre 2011 y 2014, el PBI per cápita cayó el 14,8%, es decir alrededor del 1% anual, que es la tasa de crecimiento de la población estimada por el INDEC. La economía argentina produce lo mismo para cada vez más población.
Para estimar la caída del PBI per cápita, tomé el PBI en pesos corrientes que publica el INDEC, lo dividí por el tipo de cambio libre promedio anual y luego por la cantidad de habitantes según datos del INDEC.
Variaciones
Obviamente que hay variaciones en el PBI en dólares producto del tipo de cambio, pero también es cierto que esas variaciones son fruto de las crisis económicas que afectan la inversión y el crecimiento. Es la realidad de la economía argentina.
Es más, si el cálculo se hace en dólares constantes de 2024, ajustando por el IPC de Estados Unidos, la caída es mucho mayor. Llega al 39% entre 2011 y 2014, o sea una caída del 2,6% promedio anual del PBI per capita.
La población argentina se está empobreciendo a pesar del viento de cola de principios de 2000, de Vaca Muerta, del litio y de la pampa húmeda por la sencilla razón que tenemos una tradición de ser un país que no respeta el derecho de propiedad, cambia permanentemente las reglas de juego, la presión impositiva es asfixiante y no tiene un sistema monetario estable que permita hacer cálculo económico.
Invertir en la Argentina es jugar a la ruleta rusa, y esa falta de inversión se traduce en escases de puestos de trabajo, baja productividad y, en consecuencia, magros ingresos reales.
Sumemos a ese dato que cualquier persona que hoy está en actividad ve la miseria que ganan los jubilados y se pregunta: ¿para qué voy a aportar al sistema previsional si cuando me jubile paso a la categoría de indigente? Eso mueve la economía en negro que es de baja productividad.
Ahora bien, como decía al comienzo de la nota, desde diciembre de 2024 la economía muestra un estancamiento. El rebote del gato muerto llegó a un límite y no queda claro cuál va a ser el motor que mueva la economía con el dólar artificialmente atrasado, los salarios creciendo por debajo de la tasa de inflación y la inversión esperando a ver si se concretan las reformas estructurales y se mantengan en el tiempo.
El panorama
Las tensiones que se vieron en estos días en el mercado de cambios, obedece a varios factores, pero se pueden citar dos más importantes: 1) los inversores que vendieron dólares y apostaron a que la tasa le gane al dólar, ahora optan por esperar el resultado de las elecciones volviendo al dólar, 2) ya nadie niega el atraso cambiario, salvo los funcionarios del Gobierno y algunos economistas que acompañan incondicionalmente al Gobierno.
El FMI le insiste al gobierno que el BCRA acumule reservas para el caso de una crisis interna o externa, pero también ven el déficit de cuenta corriente.
Recordemos que la cuenta corriente del balance de pagos es el resultado de los dólares que ingresan por exportaciones menos importaciones, más el pago de intereses de la deuda externa, los servicios, donde influye notablemente el turismo internacional y otros rubros más.
Si la cuenta corriente del balance de pagos da negativa, eso lleva a que alguien nos financie desde el exterior (préstamos, que lleguen inversiones externas, ingreso de capitales del sector privado, o pérdidas de reservas del BCRA).
El gráfico de la evolución del déficit en la cuenta corriente
Como puede verse en el gráfico 1, la economía argentina lleva 12 meses consecutivos de déficit en la cuenta corriente. En este déficit de cuenta corriente, influye significativa el resultado entre el turismo receptivo (turistas que vienen a la Argentina) y el turismo emisivo.
La influencia del dólar
¿Por qué no aumento el dólar con 12 meses consecutivos de déficit en la cuenta corriente? Porque, primero, el Gobierno mantuvo el crawling peg atrasando el tipo de cambio hasta que en julio del año pasado la brecha cambiaria empezó a aumentar hasta llegar al 49% y anunciaron la emisión cero. Los dólares que entraban por exportaciones y que el BCRA compraba con emisión monetaria, luego se vendíab en el CCL para frenar la brecha.
También usaron el dólar blend y el blanqueo y, finalmente, el BCRA vendió dólares a futuro para hacer bajar el mercado de cambios de contado.
Es decir, a pesar que se dice que hay libre flotación del dólar, el Gobierno recurrió a diferentes mecanismos para evitar que, pese al déficit de cuenta corriente, se aumentara el tipo de cambio y no le sirviera como ancla contra la inflación.
Recordemos que la principal preocupación del gobierno es llegar a las elecciones de octubre con una inflación cercana al 1% mensual. Si el dólar aumenta por el déficit de cuenta corriente, el IPC va a aumentar.
En síntesis, las noticias externas no son buenas, la actividad económica tiende a estancarse y el mercado de cambios está sintiendo presiones que no se sentían desde mediados del año pasado cuando el gobierno anunció la emisión cero.
Seguramente este esquema puede durar hasta las elecciones, veremos si luego de las elecciones el gobierno aplica correcciones necesarias para evitar otra crisis de las tradicionales en Argentina.
Por ahora la gente tiene paciencia, pero esa gente vive como puede mientras observa cómo la casta no paga ningún costo del ajuste.